En un contexto nacional de incertidumbre, muy parecido a lo vivido en el estado de Puebla hace algunos meses, el gobernador Interino Guillermo Pacheco Pulido, acudió al Congreso del Estado a informar sobre el resultado de su gestión que inició el veintiuno de enero y concluirá el treinta y uno de julio.

Muy pocos meses para pensar en una transformación radical, pero que sí logró alcanzar a proyectar a la ciudadanía, a los diferentes sectores de la sociedad poblana en su conjunto  y a las familias, algo de lo que habíamos adolecido: Certidumbre, que permita transitar hacia la Confianza.

Un buen ejemplo mencionado en su intervención, es la confianza del sector productivo en la figura de una de las empresas más representativas de nuestro estado, la Volkswagen, al difundir que se ensamblará un nuevo modelo vehicular lo que asegura empleo para los/as poblanas, o,  la reactivación de la inversión en la industria militar por 15 mil millones de pesos.

A diferencia de la reciente declaración del Presidente López Obrador de que solo algunas obras inconclusas de otras administraciones serán terminadas, ya que según su dicho quedarán en el “cementerio de la corrupción”;  en Puebla, el Gobierno de Guillermo Pacheco, decidió de manera responsable concluir 48 obras pendientes de administraciones anteriores. Iniciaron 11 obras nuevas y dejan integrados 50 proyectos listos para ser ejecutadas.

La visión social de este gobierno incluyó por ejemplo, la coordinación con la Secretaria de Gobernación que permitió el establecimiento de la Declaratoria de Violencia por razón de género que incluye a 50 municipios, que desde el 2016 se había venido solicitando y el establecimiento de acciones inmediatas para cumplir las 45 Recomendaciones incluidas; también, en la rehabilitación de las 10 rutas de salida del volcán Popocatépetl, y fundamentalmente en la conformación e instalación de la Comisión para la Búsqueda de Personas, tan necesaria en nuestra entidad, derivado de los datos de desaparición de personas que tenemos y que hasta antes de este período parecía eran inexistentes, entre otros.

La inseguridad en el estado de Puebla se ha convertido en una pandemia, por lo que había que sentar las bases para apuntalar una próxima atención integral de esta gravísima problemática, de manera que fue reforzado el equipamiento para los cuerpos de seguridad.

No se contrató deuda pública y se logró obtener un fallo favorable el pasado 10 del presente mes y año, tras 5 meses de juicio, que evita que el SAT cobre al Gobierno del Estado de Puebla un importe de 2 mil millones de pesos por supuestas contribuciones omitidas y un crédito fiscal heredado de otras administraciones. Muy importante porque significa dar seguridad financiera a Puebla en materia de buena calificación crediticia.

Y dejar un Plan Estatal de Desarrollo deriva de la urgencia que tenemos de abatir ese círculo vicioso en el que caímos: el de las dos Puebla la que tiene todo y aquella, la que necesita todo, y este documento justamente determina hacerlo mediante la planeación. Dicho por el propio gobernador interino en su momento: “Sin planeación no se puede caminar en la vida, en la sociedad, en el trabajo, en ninguna de las actividades humanas, es necesaria absolutamente para lograr la integridad del ser humano y la conformación de la sociedad”.

De manera que inmersos en un contexto de alta complejidad, incertidumbre y desconfianza de muchos sectores de la población, que nos produce las decisiones del gobierno federal del Presidente Andrés Manuel López Obrador; en Puebla en medio de la pluralidad, fuimos testigos de un gran esfuerzo por reconstruir certidumbre y confianza.

En Puebla, escuchamos en el mensaje del gobernador interino Guillermo Pacheco Pulido “(…) aprendimos con todo ello, que la firmeza de convicciones no elimina o reduce el trato cordial entre quienes piensan distinto” y con ello nos preparamos para recibir a las nuevas autoridades estatales que se encargaran del ejercicio de gobierno a partir del primero de agosto.

¡Misión Cumplida Maestro!