Desde las 13 horas del domingo 8 de diciembre, la red social Facebook filtró la foto de José Luis V. R, (a) El Tanque, donde solicitaban dieran información de su paradero, indicando que cuando se encontraba en algún punto de Bosques de San Sebastián había sido asaltado por sujetos desconocidos y que estos se lo habían llevado.

El Tanque desapareció junto con un Volkswagen Vento, rotulado con el número 122 de Taxi Express, placas 70-34-SSJ.

Pasaron las horas y finalmente El Tanque apareció, estaba sin vida, desnudo y en la cajuela del taxi antes mencionado, mismo que estaba estacionado en la 68 Poniente y la 15 Norte, de la colonia La Loma, cerca de Mercado Unión.

El Tanque parecía implicado en las mafias del narcomenudeo, informes extraoficiales lo vinculan con la organización de un narcomenudista identificado como La Viky, con amplia trayectoria en el Mercado Unión, de hecho, uno de los fundadores de la venta de drogas en esa zona.

Quienes lo asesinaron y pretendían desaparecer su cuerpo, fueron relacionados con la banda de Jonathan Daniel H., a quien apodan El Chango, quien tiene una organización delictiva que se especializa en los asaltos en comercios de la zona de los Fuertes y el estadio Cuauhtémoc, además de que controla la venta de drogas en diversos puntos del oriente de la ciudad de Puebla, entre estos Bosques de Manzanilla.

Y todo parece indicar que los integrantes de esta banda, que en conjunto se hacen llamar Los Changos fueron quienes levantaron a El Tanque, porque lo hallaron en la zona donde estos distribuyen drogas y lo identificaron.

Pero además de El Chango, otro grupo delictivo como Los Sinaloa, que operan en el Mercado Unión, tuvieron relación con el levantón e intento de desaparecer el cadáver de este hombre.

De Los Sinaloa, cuyos jefes están identificados como El Nariz y El Cholo, estos se unieron a Los Changos luego de que el jefe de estos también fue narcomenudista del Mercado Unión

El móvil principal del asesinato es la disputa por las rutas de la venta de droga.

La Fiscalía General del Estado (FGE), tiene la investigación en sus manos.

Nos vemos cuando nos veamos