No se requería ser adivino ni ambientalista para advertir que el llamado Catrina Fest sería un tsunami que causaría severos daños ambientales en el Parque Ecológico, el sitio donde serpientes, aves y pequeños mamíferos habitan.

Aunque ya se comenzó con la limpieza, reforestación y la plantación de más de 400 nuevos árboles, es una realidad el daño que causa un festival de música cuando se realiza en sitios que no son apropiados para ello.

Y fue precisamente tras la serie de conciertos que el propio gobernador Miguel Barbosa se pronunció sobre el tema. Estableció que durante su administración el evento de rock no volverá a realizarse en el llamado Parque Revolución Mexicana para precisamente evitar desastres ambientales.

Afirmó que Puebla sí continuará siendo sede del festival pero que se buscará un espacio adecuado donde pueda realizarse sin dañar a las plantas, un terreno donde el sonido no aturda a la fauna.

En Intolerancia Diario anticipamos, desde la semana pasada, que la organización y la realización de este evento, traería de la mano muchos daños colaterales, principalmente porque el sitio dónde se realizó no era el adecuado para albergar a los más de 45 mil asistentes ni para colocar los escenarios ni el sonido que éste tipo de espectáculos requiere.

Como lo dijimos en aquella fecha, no nos oponemos a la realización de festivales de música que bien valen la pena y que generan una importante derrama económica tanto a los organizadores como a todos los servicios colaterales, es decir desde los tenderos hasta los taxistas o conductores de aplicaciones como Uber o Didi.

Sin embargo, es claro que en esta ocasión algún o algunos funcionarios públicos se hincharon de billetes y se hicieron ojo de hormiga al firmar los permisos necesarios para que el Catrina Fest se realizara en uno de los pulmones de la capital poblana.

Con firmas, activistas buscan sanciones

Tras la cruda, la molestia de los poblanos por el cierre temporal de las instalaciones a los deportistas y el daño a la flora y fauna del lugar, es tal, que anoche, más de mil 500 personas ya habían firmado la petición “Sanción contra los organizadores de festival Catrina 2019” en Change.org

El argumento central de la queja es que “el lugar es totalmente inadecuado para un evento de tales proporciones, por la cantidad de visitantes y no tener la infraestructura adecuada para tal, además de que las especies del lugar no fueron protegidas adecuadamente, lo que resultó en la muerte de muchas de ellas”.

Si bien hay que decir que las fotos que acompañan la petición no fueron tomadas en el sitio, también es necesario aclarar que existen imágenes que confirman lo que se sabía: después del concierto, la basura fuera de los botes, fue la constante.