Cerca de 20 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la ciudad de Puebla, al mando del comandante Ernesto González Escamilla, con clave Troya, del grupo de Inteligencia y de Intervención Proactiva, fueron denunciados ante la Fiscalía General del Estado, por delitos que van desde allanamiento de morada, amenazas robo calificado, en agravio de un matrimonio a cargo de un estacionamiento que se ubica a espaldas del Mercado Hidalgo, durante la madrugada del martes 18 de febrero.

El matrimonio afectado declaró ante la autoridad qué durante la madrugada estaban durmiendo en un cuarto, ubicado dentro del estacionamiento, donde tienen su dormitorio, cuándo comenzaron a escuchar que golpeaban a la puerta y les ordenaban que abrieran, bajo el argumento de que eran elementos de la Policía Municipal. Para ese momento los uniformados se habían saltado la barda del negocio.

El encargado en estos momentos estaba semidesnudo y así lo sacaron y luego lo llevaron a colocarse contra la pared, mientras que a su esposa que estaba en las mismas condiciones, se le ordenó que se saliera de ese cuarto, porque según ellos estaban buscando a 2 que se habían metido a la propiedad.

Al encargado le ordenaron que se pusiera un pantalón y una camisa y que los llevara a otros dos cuartos dónde tienen el resto de su vivienda, lugar donde los policías registraron alacenas, burós, en busca de los supuestos delincuentes, causando destrozos y además aprovechando para llevárselo que había de valor.

Los uniformados municipales ubicaron en un pequeño escritorio, donde el encargado guarda la papelería de vehículos que ingresan y salen del estacionamiento, dónde se apoderaron de 53 mil pesos en efectivo, además un frasquito donde el matrimonio guardaba las monedas, muchas de estas, producto de propinas.

Para poder ingresar a este estacionamiento el personal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana junto con su jefe Troya, rompieron candados y forzaron puertas, sin tener primero una orden legal de allanamiento, y sin el permiso de los encargados de ese lugar, a quienes violentaron todos sus derechos y garantías.

Una vez que confirmaron los policías que en el estacionamiento y en la casa de este matrimonio no se encontraban los supuestos sospechosos que buscaban, una vez que se apoderaron de dinero y de objetos que hasta el momento no se han revelado, se retiraron tranquilamente del lugar sin siquiera ofrecer una disculpa o por lo menos el pago de los daños a las puertas y a todo lo que destruyeron a su paso.

Como consecuencia del allanamiento de morada seguido del delito de robo calificado, los uniformados y su jefe Troya, fueron denunciados ante la FGE en espera de que existe un castigo ejemplar y legal por los delitos que cometieron bajo el amparo de una corporación de seguridad municipal.

La mañana del miércoles personal de la FGE, acudieron al estacionamiento y a la casa de este matrimonio para realizar una inspección ocular en busca de pruebas de los denunciados por los afectados

Parece que en estos momentos la investigación en contra de los servidores públicos va en serio.

En un video, tomado por reporteros que estuvieron presentes en la diligencia, se encuentra parte de la entrevista que los afectados dieron a medios de comunicación, en los momentos en que se realizaban las investigaciones que le comento.

 

Nos vemos cuando nos veamos