Ambos son socios, el primero desde el interior del Centro de Reinserción Social de San Miguel, el segundo desde el módulo E, del Centro de Mediana Seguridad, de Tepexi de Rodríguez, pero ambos considerados por el gobernador del estado, como los principales generadores de violencia, durante los últimos años.

Serían ambos los responsables de las mantas que han aparecido cerca del penal de San Miguel, en otros puntos de la ciudad, donde anuncian una limpia, pero si firman cómo Sangre Nueva Zeta, además de las últimas ejecuciones violentas, sólo con un fin, seguir controlando en Puebla el narcomenudeo, lo mismo que en por lo menos tres penales del estado.

Desde el interior del penal de San Miguel, en la zona de farmacias, opera Elizabeth G., la novia de un sujeto conocido como El Terry, recientemente liberado de este mismo Cereso, dónde ingreso por delitos contra la salud, ambos gente de Arturo R. A., conocido como El Cachibombo.

Esta mujer controla el tráfico de drogas desde el área de mujeres del Cereso, son quiénes han orquestado las mantas que anuncia limpia general, advirtiendo que va a correr mucha sangre.

Marco Antonio N., (a) El Bombón, El Tío, El Negro, opera desde el exterior del Cereso de San Miguel, con un grupo criminal conocido como Los Sinaloa, siendo sus principales cabecillas sujetos con apodos: Axel, Nariz, Cholo y El Salón, los identifica porque la mayoría visten uniformes color caqui, similares al cartel que opera en Culiacán, Sinaloa.

Los campos de operación de estos sujetos van desde el narcomenudeo hasta ejecuciones, en Xonacatepec, Bosques de San Sebastián, Barranca Honda, Tres Cruces, San Felipe Hueyotlipan, San Jerónimo Caleras.

Tienen en su haber sangrientos asesinatos decapitaciones, entre sus víctimas, se encontrarían tres decapitados en San Pablo Xochimehuacán, ejecución de un taxista apodado El Tanque, cuyo cuerpo fue abandonado cerca del Mercado Hidalgo.

Y la lista de estos personajes sigue, sólo que ahora, ante la persecución que existe en su contra por parte del gobierno de Puebla, les ha dado por colocar mantas amenazantes realizar actos de violencia.

La tranquilidad a Puebla aún no llega.

Nos vemos cuando nos veamos.