¿Será que tácitamente los mexicanos estamos aplicando la estrategia sueca contra el Covid-19?
Y es que en este país del primer mundo no hubo confinamiento estricto como en otros países.
Pero aquí en México y por ende en Puebla, aunque hay un supuesto estricta cuarentena denominada Jornada Nacional de Sana Distancia, en los hechos muy pocos la aplican.
Ya se vio este 10 de mayo, sobre todo en colonias populares, donde la gente abarrotó las calles sin temor alguno a un contagio.
Fue mucho más fuerte el impulso a celebrar el Día de la Madre.
La actitud en el país -incluidos los poblanos-, de miles y miles de personas es merecedora de un estudio antropológico, por el increíble desacato a las disposiciones.
¿Se estará cosechando años de engaños al pueblo? ¿Pasó como la historia de Juanito y el Lobo?
Pero hay que ver el lado bueno –si es que lo es-, la economía para este sector de la población no se ha visto al parecer tan afectada, hasta el momento.
Y es notorio por las salidas de estas personas de escasos recursos a las calles para comprar en tianguis, puestos ambulantes de comida y hasta para el globito a la mamá.
Este fenómeno de no acatar la cuarentena ha evitado tal vez el colapso económico para estas personas que viven al día y que se niegan a resguardarse, por eso mismo hay dinero para comprar y vender.
Hay movilidad de dinero.
La excusa de la mayoría es que no creen en el Coronavirus, que es un montaje del gobierno para reprimir.
Pero también hay que decirlo, a la gente que supuestamente no cree, cuando se le reta a ir a los hospitales sin protección para ver qué tan cierta es la pandemia, nadie se atreve a hacerlo.
Todo esto puede ser producto de años de engaños de parte de las autoridades, pero también a no obedecer, simplemente por no hacerlo, algo que se tiene arraigado desde la educación que se da en casas.
Es también objeto de estudio.
Pues mientras tanto, aunque no se frena totalmente la economía, los contagios seguirán con una curva epidemiológica muy larga y la cuarentena irá por el mismo camino.
Por ejemplo, imagine que una sola persona asintomática llevara el Coronavirus a la enorme fila que se registró en la unidad habitacional Rivera Anaya, donde no hubo sana distancia para comprar flores.
De esa fila, donde había incluso personas de la tercera edad, podría haber muchos enfermos, y hasta muertos.
¿Neta era tan necesario comprar las flores para la mamá?
Ah por cierto, en Suecia donde se rompió el paradigma al no cerrar todos los establecimientos como se hizo en toda Europa, sólo se resguardó a las personas de la tercera edad.
Sólo hubo la aplicación de la sana distancia en bares, cines, teatros, etc., pero sin cerrarlos
Lo que parecía una gran estrategia para no frenar la economía que rompía paradigmas, ya está teniendo su costo.
Más de 3 mil personas han muerto en Suecia, 99 fallecidos en un solo día.
El Ministerio de Sanidad sueco, ha señalado que la mayoría de decesos se han producido en residencias de ancianos y ha alertado de que la curva de contagios sigue teniendo un nivel alto, con 24 mil 623 casos confirmados.
Ahora en México, aunque no se frena la economía en las zonas populares y la gente sigue teniendo dinero, pronto se sabrá a qué costo.
Tiempo al tiempo.