El contagio de Covid-19 de la secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) municipal, Lourdes Rosales, desafortunadamente no ha causado extrañeza.

Sobre todo porque la funcionaria no ha dejado de trabajar ni un solo día y a diario se le veía en el edificio de la Dirección de Emergencias y Respuesta Inmediata (DERI).

Lo malo es que en dicho inmueble no se guardaban las medidas necesarias para evitar los contagios, como se lo señalamos en varias entregas en este espacio.

Las aglomeraciones del personal eran diarias, por lo que obviamente derivaron en la enfermedad de varios elementos, que por mala fortuna alcanzó a la titular.

Aquí se lo avisamos desde junio en la columna intitulada “La bomba Covid en SSC”, aquí una parte.

“¿Le preocuparía a usted trabajar junto a dos compañeros, codo a codo frente a una computadora? ¿Le preocuparía además estar dentro de una oficina con al menos 30 personas conviviendo por lo menos 12 horas?

Tal vez antes no, pero ahora en los tiempos del Covid-19, es muy riesgoso de contagios ¿verdad?

Lo más increíble es que esto está pasando diariamente dentro de las oficinas de la DERI ubicado en Rancho Colorado (…) el edificio es una bomba de tiempo que podría estallar en contagios masivos. Tiempo al tiempo”.

Ahora, ocho meses después y tras muchos contagios, la misma funcionaria misma avisó en su cuenta de Twitter que desafortunadamente ya fue internada por los estragos del coronavirus.

Esto fue luego de estar confinada un tiempo, pero se complicó el estado de salud.

Finalmente, las medidas sanitarias para evitar contagios llegaron al edificio y empezaron desde la semana pasada cambios en la forma de trabajar.

Los integrantes de la corporación municipal tenían que trabajar en salas con hasta 22 personas, pegados unos a otros.

Hace unos días han empezado a distribuirlos para evitar la propagación del  coronavirus, dejando poca gente.

Confiamos en que sea bien atendida la secretaria Lourdes Rosales y echamos buena vibra para que regrese pronto a sus labores.

Los camaleones

En el distrito 6 de la capital, las cosas se han puesto complicadas las cosas para el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).

Todo porque los perfiles que se han presentado para una diputación, tienen tras de sí muchas colas que pisar.

Las marcas que arrastran algunos aspirantes serán un lastre para lograr ganar ese distrito.

Por ejemplo, María Luisa Conde, quien ya fue diputada suplente por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y excandidata al distrito 4 por las mismas siglas.

Hoy quiere repetir, pero por Morena.

Lo inverosímil del caso es que su pareja, el empresario y líder del Partido del Trabajo (PT), Yayo García Casas, pretende también ser presidente municipal de San Andrés Cholula o lo que caiga.

Pero en su camino ambicioso para obtener la candidatura, el empresario ha atacado a Morena.

Incluso en 2018, Yayo trató de ser candidato priista y ahora trabaja para que el PT vaya solo en caso que Morena busque la reelección en San Andrés Cholula.

Todo mientras su pareja María Luisa Conde pretende llegar al distrito 6 de Puebla por Morena, ¡aunque usted no lo crea!

Obviamente ante este panorama, aunque una mujer sería la mejor opción de Morena para el distrito 6, Conde deja muchas dudas.

Por eso mismo, los ojos han volteado hacia Janet Verdín, quien es muy querida dentro de las bases morenistas en el distrito.

Caso contrario es el de la expriista, que no representa realmente nada en Morena.

Es tiempo de definiciones y es tiempo de las mujeres.

Tiempo al tiempo.