La semana pasada causo escozor ver a Adolfo López Badillo en la lista de aspirantes a comisionados del Instituto de Acceso a la Información Pública de Puebla (Itaipue), luego de su nefasto trabajo cuando fue presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Puebla (CDH).

¿En qué cabeza cabe, que luego de ser uno de los principales protectores de la represión del exgobernador Rafael Moreno Valle, ahora quiera estar en el organismo garante de la transparencia?

¿Se le olvidaría su omisión en el caso Chalchihuapan?

¿Se le olvidaría que su gestión en la CDH, tiene el récord de menos recomendaciones a autoridades por violar derechos humanos?

Y así podemos seguir la lista de olvidos, pero no hay tanto espacio.

En verdad, eso se llama cinismo. 

Pero, así como al señor López se le olvida la cola que arrastra, pasa lo mismo con algunos aspirantes de la lista.

Tal es el caso de Claudette Hanan Zehenny,  a quien ya se le ve como la herencia de la actual comisionada morenovallista, Marcela Carcaño, al ser pariente de su esposo.

Pero eso no es todo, en julio de 2013, cuando Claudette Hanan trabajaba en la Delegación del IMSS en Puebla, fue acusada y despedida por estar supuestamente inmiscuida en la venta de plazas, así como en un desfalco en el Área de Abastos, además de mantener en la nómina a aviadores, según reportes periodísticos.

Y aunque usted no lo crea, actualmente es secretaria técnica del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA), donde su actuación ha pasado de noche.

¿Qué experiencia tiene en transparencia? 

Ninguna, obviamente.

El caso de Adelita de Jesús Murillo Chejin, no es tan grave, pero si tiene impedimentos para llegar a la Itaipue.

El principal es que es priísta e incluso formó parte de la planilla de Guillermo Deloya, cuando pretendía ser presidente municipal de Puebla.

Y no tenía cualquier cargo, sino el de la Sindicatura.

En tanto, otro en la lista es Sergio Díaz Sáenz, hermano de Roberto, quien ya fue presidente de la extinta Comisión de Acceso a la Información Pública (CAIP), antecesora de ITAIPUE.

Ahí la bronca la trae el hermano, quien en su momento fue calificado como autoritario por despedir de manera injustificada a dos empleados de CAIP.

El entonces comisionado presidente, acusó a los trabajadores de filtrar a los medios de comunicación sus negociaciones con secretarios de despacho para maquillar o bloquear información pública.

Ojalá su hermanito no traiga su enseñanza y forma de operar.

Una de las favoritas para quedar sería Ingried Rojas, actual titular de la unidad de Transparencia de la oficina del Ejecutivo, al haber hecho un buen trabajo hasta el momento.

Lo único que le podría pesar, es que se viera como una imposición.

En tanto, Rodrigo Santisteban también se apuntó, luego de que fue coordinador de Transparencia en el gobierno de Claudia Rivera.

Pero su trabajo fue tan malo, que reprobó por primera vez al ayuntamiento capitalino en mediciones del mismo Itaipue.

Del 11 al 26 de noviembre, el Congreso de Puebla revisará los documentos de todos los aspirantes a ocupar los cargos de comisionados en el organismo garante de la transparencia en Puebla.

La convocatoria fue emitida el 18 de octubre para elegir a quienes suplirán a las excomisionadas Marcela Carcaño Ruiz y Gabriela Sierra Palacios. 

Estaremos pendiente de los procesos. 

Tiempo al tiempo.

La lista 

Daniel Cortés, Harumi Fernanda Carranza, Marco Ángel Vela, Ingried Rojas, Rodrigo Santiesteban, Martín Fuentes, Claudette Hanan, José Gil Jiménez, Sergio Díaz, Adolfo López Badillo, Gabriel Guerrero, Nohemí León, Grecia Roldán, Ernesto Cruz, Araceli Vargas y Lorena Varela.