De verdad que muchas veces la afición es sumamente ingrata con su equipo, hemos visto semana a semana como la escuadra de Larcamón se parte el alma y logra resultados.

Cada que el Puebla obtenía un buen resultado ya sea de visita o en casa, los halagos en redes sociales no se hacían esperar, Larcamón a la selección se leía, Israel Reyes será el nuevo seleccionado nacional titular para la copa del mundo, Araújo es mejor que Tabó, ni se extraña al uruguayo, se leía de manera cotidiana, Puebla será campeón, ya nos toca después de 31 años, nadie para a la franja, etc.

Así y más durante nueve semanas, todo era coser y cantar.

Se vino una pequeña ‘crisis de resultados’, así le llamo yo, y bueno, ya es el acabose, se perdió en Toluca dos goles por uno en un partido donde el resultado me parece hasta cierto punto circunstancial y donde la franja no pudo tener contundencia, es cierto, perdió bien, ante un Toluca que traía mucha presión encima y donde Ambriz realizó cinco cambios que al final le terminaron dando resultado.

Las críticas sobre Larcamón y sus jugadores no se hicieron esperar, ahora resulta que ya no corren, que ya no se esfuerzan, que Salas no debe jugar, resulta que De Buen era la solución del equipo y que Cortizo como no jugó, al equipo no le alcanzó para ganar y así una serie de estupideces (con todo respeto) que se leen en la redes de los aplaudidores de Ro(b)a y los 40 ladrones.

Nos damos cuenta que muchas veces los llamados ‘aficionados’ (algunos opinadores) no tienen ni idea de cómo son los tiempos en el desarrollo de una temporada para los equipos.

Les explico, el Puebla no ha venido a la baja como muchos creen (lo cual sería normal), pero no es el caso.

Con el paso de los partidos los equipos rivales mejoran tanto su funcionamiento como su rendimiento, empiezan a jugar mejor, ya tienen estudiados a los rivales y eso genera que ganar sea cada vez más complicado.

Para un equipo como el de Larcamón que gana a base de esfuerzo y fútbol sin tener grandes individualidades, con el paso de los partidos se complica cada vez más.

El cierre será complicado y la franja seguirá sumando, pero será difícil y tortuoso, que nadie espere días de campo.

Que nadie considere al Puebla el equipo más fuerte del fútbol mexicano, que lo consideren el equipo con el corazón y esfuerzo más grande de todos y con su dosis de fútbol que le permite competirle a cualquiera en cualquier terreno de juego.

Larcamón y sus jugadores en reunión privada llegaron a la conclusión de mantenerse alejados en la medida de lo posible de los directivos (empleados) del equipo y de sus desórdenes y decidieron que los desórdenes de estas ‘liendresno les afectarían en lo más mínimo.

Larcamón y los jugadores cuentan y contarán con el apoyo de la afición poblana, la de verdad, y no necesitan de presiones mandadas de ya saben dónde, después de que el equipo (jugadores y cuerpo técnico) ya no los toman en cuenta.

Se viene Pumas para el próximo viernes donde la franja hará hasta lo imposible para retomar el rumbo y sumar los tres puntos pendientes que los pondrían en 25 y con la llave de la clasificación en la mano.

Puebla volverá a tomar rumbo y ritmo.

Que no quepa duda.

Nosotros como siempre seguiremos en línea.

Hasta la próxima.