El riesgo de abrir el juego del destape con tantos meses de anticipación es que se podrá observar con detenimiento lo qué hay en las cañerías.  

Además quienes hoy ocupan alguna cartera en el gobierno estatal, como Gabriel Biestro en la Secretaría del Trabajo y Melitón Lozano en la SEP, tendrán una lupa sobre cada una de sus acciones, omisiones y decisiones.  

Lo mismo se les cuestionará el destino de los recursos que manejan que su capacidad para resolver desde problemas sindicales hasta inconformidades magisteriales.  

Por decirlo así, se pusieron un blanco en la espalda que sus detractores ya comenzaron a utilizar.  

Ayer, no habían pasado ni 4 horas del video que subió Melitón Lozano a sus redes confirmando que buscará la candidatura a la gubernatura en 2024, cuando a través de diversos grupos de whatsapp hicieron circular un escrito en donde se le recriminó que aprobó un operativo con la Policía Estatal en contra de los maestros que protestaban afuera de la SEP, el 15 de septiembre del 2021.

“La administración que usted representó estando al frente de la Secretaría de Educación Pública es la que más ha cesado a profesores Señor Melitón. Incluso los ceses han sido con el uso de la fuerza pública”, señala el texto. 

Para Biestro las cosas, pese al respaldo que obtuvo ayer en la mañanera y que no se le puede regatear que efectivamente es uno de los integrantes originales de Morena en Puebla, las cosas tampoco serán como un día de campo.  

A la bomba de tiempo que tiene en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje por el tema de los laudos y juicios de los exburócratas, situación que costará varios millones de pesos al erario, se suma la temporada de revisiones salariales, emplazamientos a huelgas y de no lograr los acuerdos: las temidas huelgas.  

Históricamente la entidad ha podido lograr buenos acuerdos y con ello evitar las huelgas, tanto así que al final del sexenio de Mario Marín parte de los logros que se pudieron presumir fue precisamente que el número de banderas rojinegras no llegó ni a 10.  

La primera aduana está en puerta. Mañana viernes 8 de julio, el sindicato de la tradicional empresa Talavera Uriarte podría estallar la huelga en caso de que las negociaciones, en donde Biestro debe ser mediador, no lleguen a buen puerto.  

Como se observa en este par de ejemplos, el destape con tanta anticipación desgastará terriblemente a los (y las) suspirantes porque habrá mucho tiempo para ir dirigiendo los misiles en esta guerra.  

Al final no se trata de salir antes en esta carrera si no de hacer el triatlón y sobrevivir.

¿Alguno de los que ya levantó la mano o que está próximo a hacerlo podrá llegar a la meta? 

Veremos y diremos.