Ya se habla de un “cártel inmobiliario” que despacha desde la Recta a Cholula, por el cual puede surgir una investigación anticorrupción próximamente.  

Algo parecido al descubierto recientemente en la alcaldía Miguel Hidalgo de la Ciudad de México, donde abundaban los permisos irregulares y vistas gordas.  

Todo porque la Actualización del Programa Subregional del Estado, implementado por la Secretaría del Medio Ambiente de Puebla, cayó en manos de un morenovallista confeso: Héctor Hernández Sosa, por medio de su consultoría.  

Se dice que llegó al cargo designado por la titular de la dependencia, Beatriz Manrique, a través de la esposa del director de Gestión de Suelos y sus Usos, Adrián Velázquez Luna.  

La designación ha causado mucho ruido en el mundo inmobiliario, no solo por su pasado y preferencias políticas no acordes a la actual administración, sino por el manejo que se ha dado en los últimos meses.  

Incluso ya hay testimoniales en el municipio de Santa Clara Ocoyucan, donde hay terrenos muy deseados por su alta plusvalía.  

Así, apoyando a Antorcha Campesina, se llevaron las consultas del Programa Subregional a esta zona controlada por esta organización contraria al gobierno estatal.  

De este modo, parte del grupo consultor de Hernández Sosa se encuentra en Ocoyucan cambiando usos de suelo de Lomas a sabiendas de la titular de la dependencia.  

Incluso basta ver que ahora hasta las barrancas de la zona ya no son de riesgo, todo para seguir explotando el territorio.  

Por ejemplo, hay una hiperactividad del grupo en los cambios de uso de suelo en la zona metropolitana, como en el Humedal de Valsequillo, donde al parecer “no saben” que es zona protegida.  

Pero con la ayuda de Héctor Paulino, director de Desarrollo Urbano e Impacto Ambiental, todo es posible y en la consultoría que hasta en su sociedad con Romero Serrano, ha tenido muy buenos rendimientos, tanto que una prominente presidenta municipal de la 4T adquirió Casa en La Vista.

Se dice además, que mediante este “cártel inmobiliario”, en las pasadas administraciones morenovallistas, se apoyaron para enriquecerse y ahora pretenden seguir la misma ruta.  

Por cierto, dicen que todos ellos coincidieron en el Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN).  

Todos cuates.