Pos resulta que en las tripas de la alianza opositora se acaba de armar un verdadero tirabuzón que, más allá de las calenturas electoreras, podría terminar jugándole a las contras a panistas y perderistas, digo, perredistas, por igual.
Así como lo leen, mis valedores, y es que los dirigentes nacionales Marko Cortés y Jesús Zambrano, presumieron a los cuatro vientos que denunciaron penalmente a Eukid Castañón.
Como por arte de magia, a pitufos y amarillos les nació harto la preocupación de cómo se manejaban las lanas en los tiempos del Rafa Moreno Valle.
Cómo no, si ahora sí les brincó cómo se habrían movido algo así como 568 millones de morlacos, cuando el Eukid era el que repartía la baraja como contralor cemitero.
Es más, mis carnales, tanta es la tronadera de dedos que terminaron rematando que la denuncia contra el Eukid es en la Fiscalía federica por presunto desvío de recursos y hasta peculado.
Como diría mi Tía Lucha, “lo que se ve no se juzga” pos a pesar que cantaron a lo sabroso que la Auditoría Superior de la Federación lo tiene en la mira, ¿hasta ahorita se acordaron del Eukid?
Digo, nomás hay que saber contar bien básico para entender que los tiempos de Moreno Valle pa’ acá ya hay varios años de diferencia.
Hartos ayeres han pasado como pa’ que a estas alturas se jueguen la carta de denunciar a quien fue uno de sus más fieros operadores, banda.
Tanto así, que a ojo de buen cubero podría salirles el tiro por la culata, pos ¿se imaginan cuántas historias se sabe el Eukid y más sobre quienes fueron sus aliados en esta Puebla camotera?
Y es que pa’ nadie es un secreto que desde que le cambió la suerte al Eukid, la cargada panista en su contra se ha puesto de a peso y lo ven ahora como rival polaco.
No vaya a ser que luego, si no le atinan a la estrategia, vayan a terminar con la cola entre las patas, pos entre exaliados se conocen hasta los más oscuros secretos.
El Dandy y sus aspiraciones polacas
Vaya giro que dio el caso del homicidio de Néstor Amir, mejor conocido como “El Dandy de la Cumbia”, mis valedores.
Mientras se investigaba su chamba como músico, salió a relucir que también había hecho sus pininos pa’ entrarle en la polaca cemitera.
Eso no es todo. Buscó ganarse la candidatura a la presidencia municipal de Olintla, pero el proceso lo fue llevando desde las entrañas de Morena, aunque pasó sin pena ni gloria.
Ahí de mientras, la investigación está en curso y no duden que aún hay mucha tela de dónde cortar.