El 10 de noviembre de 2023, Alejandro Armenta, se congratulaba por haber sido seleccionado como el candidato a la gubernatura de Puebla por el Movimiento Regeneración Nacional.
Ahora, exactamente un año después, desayunó con el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, para amarrar acuerdos del llamado segundo piso de la Cuarta Transformación (4T).
En el encuentro estuvo presente el próximo secretario de Gobernación Samuel Aguilar Pala, donde hablaron del impulso que deben tener las iniciativas de la presidenta Claudia Sheinbaum, como la industrialización del cáñamo, que fue impulsada desde el Senado de la República cuando lo presidió Alejandro Armenta.
Proyectos caminando.
El camino
Hace un año, las encuestas que encumbraron a Alejandro Armenta, eran basadas en la realidad.
Esos mismos estudios demoscópicos que atacaron sus contendientes.
Por ejemplo, Ignacio "Nacho" Mier Velazco, decía siempre que le hablaba al oído y era escuchado siempre por Andrés Manuel López Obrador.
Afirmaba el entonces jefe de la bancada de Morena en la cámara de diputados, que el posicionamiento de Armenta era una falacia.
Más bien, la falacia era del acercamiento que decía que tenía Nacho.
Ahora lo sabemos.
Ahora, un año después, aunque es senador, es uno de tantos.
Ya no puede presumir o alardear que le habla a alguien al oído.
Armenta, quien obtuvo la candidatura gracias a su ventaja en las encuestas.
Pero también tuvo mucho trabajo en el escenario local y nacional, además de su trayectoria de 35 años.
Ese liderazgo que llevó al apoyo ciudadano, fortalecieron su candidatura con un enfoque claro en la unidad y el desarrollo de Puebla.
Aunque muchos en su momento quisieron ponerle el pie, (léase de nuevo Nacho, entre otros) no pudieron.
El tiempo dio la razón y todo cayó por su propio peso.
Ahora es el mandatario electo con más legitimidad en los últimos años.
Las encuestas, nunca mintieron.
La fiesta y los colados
Se realizó en la Fiesta de la Victoria del pueblo de México, organizada por los integrantes de Morena.
Al evento, llegó Gerardo Fernández Noroña.
Pero también llegaron muchos advenedizos.
Por ejemplo, Juana Marmolejo, a quien nunca se le vio en campaña, pero ahora llegó con chofer, fotógrafo propio y hasta un chaleco de “Secretaría de Comunicación”.
Lo que nunca pudo ser, ni será.
Saludó así a la prensa, quienes ni la conocían.