El triunfo avasallante de Jorge Romero a nivel nacional fortaleció al grupo de Lalo Rivera en Puebla, independientemente de que los votos entregados en el estado no hayan sido los ofrecidos.
Lalo, lo ha dicho, no se empecinará en ser el dirigente estatal, sin embargo, sí hará lo necesario para que un integrante de su grupo sea quien ocupe esa cartera.
Hoy por hoy no se ve otro camino para los blanquiazules en Puebla, más allá de los liderazgos conocidos, no se cuenta con una nueva figura que les permita encabezar al PAN, sin Lalo.
Ante esto, el gran reto de los panistas será reconstituirse, reagruparse, definir nuevos objetivos, metas y comenzar a trazar una ruta firme para el 2027 y el 2030.
En el pecado podrían llevar la penitencia. Acción Nacional tendrá un enorme problema: el fantasma del hoyo financiero que presuntamente dejaron Adán Domínguez y Lalo Rivera, en el Ayuntamiento de Puebla.
Si las investigaciones, por este presunto mal uso de los recursos públicos se comprueban o se generan acciones legales en contra de los integrantes del grupo de Lalo, la oposición panista estaría prácticamente desarticulada.
La vulnerabilidad te impide ser y actuar como oposición. Eso ha quedado demostrado a nivel nacional. Los errores y abusos del senador, Miguel Ángel Yunes Márquez, así como los señalamientos en contra del ministro Alberto Pérez Dayán, fueron las herramientas que utilizó la 4T para someter y romper a los bloques de oposición que buscaban contener los excesos de Morena.
Quienes militan en la Cuarta Transformación ya se aprendieron el camino, encontraron la fórmula para doblegar voluntades, utilizando a la justicia como garrote político y no dudarán en replicar el esquema a lo largo y ancho del país, en donde Puebla no está excluido.
¿Cuál será el peso real de una oposición panista, cuyo líder político se encuentre en dimes y diretes entre la Auditoría Superior del Estado y la FGE?
¿Cómo podrá Lalo y su equipo “rescatar a México” del régimen actual si tiene una soga en su cuello?
El triunfo de Jorge Romero, más allá del oxígeno político para Lalo, es, por desgracia, una victoria más para los simpatizantes de la 4T.
Ni más ni menos.
El cinismo de Alcalde
La estrategia para atender la pandemia por Covid en México fue una de las peores del mundo, el exceso de mortalidad lo confirma.
Una de las malas decisiones que se tomó fue la vacunación a cuentagotas. Ante ello miles de mexicanos tuvieron que interponer amparos para garantizar que las vacunas centralizadas por el gobierno federal se les aplicaran.
Pero a Luisa María Alcalde se le ocurrió que era buena idea mentir en público y ante los veracruzanos de Boca del Río dijo exactamente lo contrario.
¿Cuál era la macabra intención de la presidenta de Morena al afirmar -falsa y dolosamente- que “el Poder Judicial puso todos los obstáculos y amparos para que no hubiera vacunación en el COVID?
Las fake news matan.