Estilos de vida saludable, que incluyan actividad física, una dieta correcta y el manejo adecuado del estrés, son acciones preventivas que evitan enfermedades de las vías respiratorias, como el resfriado común, refirió la coordinadora de Nutrición del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tlaxcala, Xóchitl Juárez Guzmán.

Detalló que el cuerpo necesita todos los recursos para combatir enfermedades, por lo que se recomienda consumir alimentos de buena calidad, con un alto contenido de nutrientes antioxidantes y que sean fáciles de digerir. 

“Las enfermedades respiratorias se contagian con mucha facilidad y afectan las vías respiratorias, incluidas las vías nasales, los bronquios y los pulmones, es por eso que se debe tener un sistema inmunológico fortalecido y una buena salud emocional, libre de estrés”. Puntualizó Juárez Guzmán. 

Para fortalecer el sistema inmunológico en términos de nutrición, es recomendable consumir alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas y minerales, así como procurar consumir todos los grupos de alimentos indicados en el plato del bien comer. 

Se recomienda evitar el consumo de azúcar, que se encuentra en dulces, refrescos o bebidas gaseosas, así como saborizantes y edulcorantes para agua, además de alimentos ultra procesados. 

En un proceso de recuperación por enfermedades de las vías respiratorias, se debe evitar el consumo de alimentos procesados o industrializados, como las papas fritas, hamburguesas o comida rápida, ya que contienen altas cantidades de grasa de baja calidad, azucares y sales agregadas, con poca cantidad de fibras dietéticas y una cantidad insignificante de nutrientes. 

“Aprender a comer con colores, se debe incluir a nuestra dieta diaria  frutas, verduras y legumbres de diferentes colores nos asegura una nutrición rica en vitamina A, C, D, y E, vitaminas del complejo B, hierro, zinc, selenio, magnesio como: espinacas, brócoli, col, lentejas, garbanzos, naranja, guayaba, mandarinas, limón, piña y mango”, precisó la nutrióloga. 

Además de la ingesta de infusiones de fruta o verduras, sopas y caldos calientes, también podemos añadir alimentos ricos en prebióticos como el kéfir que nos ayuda a la microbiota o flora intestinal, para fortalecer el sistema inmune.

La nutrióloga recordó que una buena hidratación es esencial para la recuperación y para mantener un equilibrio que favorezca el sistema respiratorio. El agua es vida, es salud, es higiene.