“Que siempre no”, fue la respuesta de la diputada local del PRI y lideresa del Sindicato de Trabajadores del Sector Salud en Tlaxcala, Blanca Águila Lima, al preguntarle por sus intenciones de participar en la contienda interna del tricolor para renovar su dirigencia estatal.
Si bien su argumento fue no buscar otro encargo político y “distraerse de su labor legislativa”, en los corrillos del partido la realidad es otra.
Cuentan los que saben que la diputada no quiere sacarse la rifa del tigre y ser parte de la historia negra del tricolor, porque ya no saben ni cómo levantar de las cenizas al expartidazo.
Es más, a escasos días de comenzar el proceso interno en el PRI estatal no tienen idea de qué rumbo tomar ahora que desde el CEN hay alianza cantada con el PRD y el PAN rumbo a 2024.
¿Quién se echará el tirito de poner las dos mejillas en el PRI? (LS)
Protección a periodistas en la mira
Al fin será concretada la Oficina para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, nombre específico como necesario para atender casos de agresiones contra el sector, más en tiempos tan peligrosos como actualmente se viven en México.
Pero también la duda asalta de inmediato: ¿esta oficina no debería contar con autonomía para cumplir con sus funciones, quizá como funciona la CDH de Tlaxcala?
Depender de la Segob siempre será un arma de dos filos, pues la historia reciente demuestra que es justo desde los gobiernos donde se operan ataques a la prensa.
¿Será que la Oficina para la Protección de Periodistas suelte coscorrones a sus jefes cuando autoridades de Morena y sus aliados amedrenten reporteros?
Vaya encrucijada tendrá este organismo, de entrada ser juez y parte, no sea que le pase como al dicho y “la mano derecha termine ignorando lo que hace su mano izquierda”. (LS)
SMT, cañonazos de buenas intenciones
Varias semanas tuvieron que pasar desde que se ventilara el presunto conflicto de interés en que incurría el ahora exdirector de Transportes de la Secretaría de Movilidad, Rubén Domínguez Medel, tras revelarse que en su calidad de empresario era contratista de la SEPE.
Pues bien, al fin el angelito renunció a su cargo en la dependencia estatal, sin embargo, las autoridades de Movilidad y Educación Pública aún no aclaran si mantiene el contrato mensual de 15 millones de pesos por traslado de maestros con “Autotransportes para Turismo y Pasaje Alejandra”, de la cual es dueño.
Queda claro que la presión mediática no fue parte de la decisión “voluntaria” del exfuncionario, sino un cañonazo de 15 millones de buenas intenciones.
Vaya manera de echarle candado a temas tan delicados como éste y más a la espera que el olvido se lleve cualquier rastro que huela a podrido. (LS)