El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, descartó que se solicite un endeudamiento para la construcción de un penal en el estado al señalar que ya es suficiente con la deuda que actualmente se paga por 50 mil millones de pesos, heredada por el mandatario estatal, Rafael Moreno Valle.

El mandatario local refirió que empresarios se acercaron a él para exponerle el proyecto de construcción de nuevos penales en la entidad, pero eso significaba la adquisición de 20 mil millones de pesos de deuda a pagarse por varios años, por lo que rechazó este proyecto.

“Les dije que no, que conmigo no cuenten para ese tipo de proyectos, si ya me dejaron 50 mil millones de pesos, imagínense que empiece a construir un reclusorio que le costará cargas tributarias que le costará una deuda de 20 mil millones de pesos a los poblanos”, dijo el mandatario poblano.

Empresarios pretendían la construcción de nuevos penales, por medio de una Asociación Público Privada (APP), sin embargo, el tema fue rechazado por el gobernador, pues ya es suficiente la carga de endeudamiento para la entidad.

Miguel Barbosa refirió que se requieren de al menos 2 mil millones de pesos para la construcción de al menos un penal que divida al de San Miguel, que es el más poblado.

Sin embargo, agregó que el gobierno del estado está analizando de dónde saldrán los recursos para este proyecto, el cual fue anunciado desde los primeros meses de su administración.

El mandatario local dijo que el gobierno federal no le aporta nada al estado, aunque envía a reclusos considerados de alta peligrosidad a penales federales.

Custodios deben cumplir exámenes de control de confianza

Por otra parte, el gobernador comentó que uno de los requisitos fundamentales para emplear a los custodios en los diferentes penales es que cuenten con exámenes de control de confianza, por lo que se realizará una revisión con el objetivo de que todo este en orden en los 22 penales ubicados en el estado.  

Esto, en virtud del caso de bebé que fue ingresado al penal de San Miguel y posteriormente murió al interior del Centro de Readaptación Social (Cereso).

El bebé, previamente tuvo una cirugía y posteriormente fue abandonado en un basurero. Ante ello, el mandatario estatal dijo que el caso no quedará impune y ya se realizan las investigaciones correspondientes del caso.