El gobernador, Miguel Barbosa, afirmó que no está dispuesto a asumir solo el costo político de la recuperación del servicio de agua para Puebla capital, ya que es una responsabilidad que también debe ser asumida por otros. 

“Quienes piensan que yo voy a tomar decisiones para que políticamente me afecten, se equivocan, las vamos a tener que tomar de manera colectiva, como gobierno y como gobiernos, para que todos asuman su responsabilidad”.

Durante su conferencia de prensa aceptó que ya tiene trazada una ruta legal para el caso, pero recordó que no le corresponde ir solo en este asunto.

“Mi gobierno no va a asumir una responsabilidad, que no le corresponde de manera absoluta. Sí le toca también asumirla, pero no de manera absoluta, porque el servicio municipal es municipal”.

Miguel Barbos resaltó que “el poder público responsable se ejerce de cerca, no de lejitos”, aunque no se refirió a alguien en particular.

Deudas con Banorte

El mandatario poblano aceptó que la concesión del agua potable le pertenece a Banorte, aunque también otras deudas heredadas por la administración de Rafael Moreno Valle (2011-2017).

“Una concesión que de origen se dio en los términos del 2013, a una empresa que tiene venta de acciones, nueva integración de socios que son personas físicas, pero básicamente corporativos, ha hecho que para bien o para regular de Puebla, todas las deudas generadas por el morenovallismo, todas, hoy estén en manos de Banorte”.

En el caso del suministro de agua potable, negó tener conocimiento sobre si la empresa encargada del servicio, funciona en números rojos. 

Sin embargo, reiteró que, en caso de lograr la recuperación de la concesión para la autoridad municipal, se necesitarán miles de millones de pesos para llevar el líquido a los hogares poblanos.

“Se va a requerir una inversión de miles de millones de pesos para dotar de agua al municipio. Todo esto tiene implicación de responsabilidad en el gobernar”, declaró.