Y cuando acabó la sesión extraordinaria, con todo y “mayoriteo” y desquite, la inconstitucionalidad de la ley electoral aún estaba ahí. 
El milagro no llegó.

Juan Carlos Espina von Roehrich, quien la víspera había prometido que convencería con argumentos a sus compañeros diputados para que ahora sí no incurrieran en otro yerro de inconstitucionalidad, y votaran en contra del dictamen de la Comisión de Gobernación y su “parche” legislativo, no logró persuadir a sus compañeros.  Es más, con la aprobación del transitorio se sigue violando la ley, plantearon diputados.

Desde un programa radiofónico —Oro Noticias— Espina von Roehrich calificó de “mansos corderos” a los diputados de la actual Legislatura lo que encendió, ya en tribuna, el debate parlamentario. Pero de nueva cuenta pesó más la “línea” de los coordinadores parlamentarios que los argumentos de los opositores y a continuación el Congreso local actuó como instrumento de revancha legislativa en la disputa entre el morenovallismo y el panismo. 

Cuatro diputados del Partido Acción Nacional votaron contra el “parche” legislativo para revertir la reforma electoral fast track aprobada el pasado 3 de septiembre en una polémica sesión. Los diputados del blanquiazul sostuvieron que la enmienda no resuelve de raíz la inconstitucionalidad del ordenamiento electoral. 

Al igual que sucedió en una sesión pasada los coordinadores del PT, PRD, PRI y Panal solicitaron, al inicio de la sesión el retiro de un dictamen benéfico para la ciudad de Puebla, iniciativa propuesta por el diputado Juan Carlos Espina von Roehrich, crítico de la reforma electoral fast track y ahora del “parche” legislativo.

Los coordinadores parlamentarios ordenaron quitar del orden del día el dictamen aprobado por la Comisión de Justicia. El dictamen elevaba las sanciones a quienes dañen el mobiliario urbano municipal. En la versión del presidente del Congreso local, Edgar Salomón Escorza, se descartó que haya habido un “desquite” en contra de Espina al “bajar” la iniciativa de marras. 

En una sesión de desencuentros, los diputados morenovallistas aprobaron sin miramientos el “parche” legislativo.

De nada valieron las explicaciones didácticas al pleno por parte del presidente de la Comisión de Gobernación, Juan Carlos Espina, quien evidenció el error de los diputados en su intento de revertir la inconstitucional reforma electoral aprobada hace más de un mes con un artículo transitorio. Los diputados Rafael von Raesfeld Porras, Juan Carlos Espina von Roehrich, Ana María Jiménez Ortiz y Josefina Buxadé Castelán votaron en contra del “parche” legislativo a sabiendas de que al final la maquinaria oficial arrasaría con su posicionamiento crítico.

Ante la anunciada crítica al “parche” legislativo, los coordinadores parlamentarios retiraron de manera súbita el punto 3 del orden del día aduciendo que querían más información. En la propuesta del ordenamiento legal se incluye una serie de sanciones para castigar a quienes roben el mobiliario urbano. Aumentan las sanciones de cuatro a ochos años de prisión y multa de 500 a 2 mil días de salario mínimo. La sesión se entrampó, ya que mientras el presidente de la Comisión de Justicia del Congreso, Gerardo Mejía Ramírez, señalaba que se carecía de sustento para retirar del orden del día el dictamen, otros diputados afines al gobierno estatal, como Guillermo Aréchiga, defendieron eliminar el punto del orden del día.

Al igual que lo hizo hace algunas sesiones, de nueva cuenta el diputado de Movimiento Ciudadano, José Juan Espinosa Torres, pidió más tiempo para revisar la iniciativa y repitió que los diputados no sesionarían al gusto o “contentillo”. A la diatriba de Movimiento Ciudadano se sumó el diputado del Panal, Héctor Alonso Granados.

Animado por la intervención de Espinosa Torres, Alonso Granados se sumó a las críticas vertidas por Espinosa. 

La defensa del bomberazo legislativo la realizó Guillermo Aréchiga Santamaría.

El coordinador de los diputados del Panal afirmó que la reforma al artículo primero transitorio del Código de Instituciones y Procesos 
Electorales del Estado de Puebla, aprobado ayer por el pleno, refiere que el decreto entre en vigor a partir de la fecha de su publicación, mismo que no aplicará para el proceso electoral que inicia en el mes de noviembre de 2012. Aréchiga resaltó que el Poder Legislativo no incurrió en inconstitucionalidad al avalar dicha reforma.

Desde tribuna, el legislador aseguró que en ningún momento se violó la Constitución y será la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la que determinará una resolución a las controversias presentadas, por lo que el Congreso deberá presentar en tiempo y forma los argumentos que avalan la aprobación. Asimismo, el representante popular aseveró que dicha modificación al COIPEP establece que será en el próximo proceso electoral cuando entre en vigor, permitiendo tomar las acciones provisorias, con la única finalidad de no desgastar a la ciudadanía con elecciones continuas y ofrecerles procesos electorales con menos costos y transparentes.

“Hoy dejamos perfectamente claro que el espíritu que anima esta reforma es para decir que se aplicara al siguiente proceso electoral, para que nadie sienta que se hizo un traje a la medida.”