Después de 22 años de destierro de Puebla iniciado durante la administración del gobernador Mariano Piña Olaya, cuando fue aprehendido y enviado a penales de máxima seguridad; tras obtener su libertad en 2002, siendo secretario de Gobernación Carlos Alberto Julián y Nácer, se le prohibió volver a Puebla, Rubén Sarabia Sánchez, mejor conocido como "Simitrio", reapareció en público siendo invitado a la toma de posesión del presidente municipal Eduardo Rivera Pérez.


Después de las 12:00 horas cuando el director de Gobernación municipal recibió la llamada de que "Simitrio" llegó acompañado por Jorge Cruz Lepe. El nuevo funcionario salió a recibir al líder de la organización 28 de Octubre, quien iba acompañado de su esposa Rita Amador.


Con una imagen diferente a la de hace casi 22 años, cuando se dejó crecer el bigote y algo de barba, el "Simitrio" de ayer contrastaba con el recuerdo, ya que aún con el pelo negro no podía ocultar sus casi 60 años de edad.


Pero el contraste fue mayor cuando las autoridades municipales lo recibieron con el mismo respeto que le tenía el presidente municipal Jorge Murad Macluf en 1986.


Después de dos décadas volvió a hablar.
‚ÄîVolví porque fui invitado a la toma de posesión del presidente municipal.
‚Äî¿Siente que habrá un cambio?
—Puebla tiene que cambiar, no puede estancarse; tiene que moverse, desarrollarse en todos los aspectos.
‚ÄîTerminó su destierro‚Ķ
‚ÄîEso lo tienen que determinar las autoridades competentes porque jurídicamente no hay razón para que no esté en Puebla.
‚Äî¿Espera el diálogo con las nuevas autoridades?
‚ÄîNosotros como organización siempre hemos estado abiertos al diálogo.
‚Äî¿Por qué hasta ahora?
‚ÄîSe buscó un acuerdo con Mario Marín para indicarle que no era correcto, y que se reconociera que era una violación la las garantías individuales; con el nuevo gobierno no se han tenido acuerdos, ellos tendrán que mostrar la voluntad.
‚ÄîSu sentimiento después de 22 años de destierro‚Ķ
‚ÄîMe siento bien; entiendo que mi vida ha sido siempre una cuestión de lucha, y como cualquier lucha aunque se gane se lleva uno una mentada de madre y con mayor razón si se pierde.
‚Äî¿Seguirá en la lucha?
‚ÄîHe estado en la lucha, incluso desde la prisión hacíamos pronunciamientos por la libertad de los presos políticos, denuncias por el sistema de prisiones en el país, propuestas para cambiar el régimen penitenciario, criticas al mismo‚Ķ
‚Äî¿Volverá a ser el dirigente de la 28 de Octubre?
‚ÄîNo, la organización tiene sus liderazgos, sería una falta de respeto hacia ellos, además de que no ayudaría.
‚ÄîEs un símbolo de la lucha‚Ķ
‚ÄîNo, yo soy como cualquiera, con la diferencia que en la dinámica de la situación de la cárcel significó en lo particular, pero eso le pasa a cualquier dirigente.
‚Äî¿Cómo ve la situación en Puebla?
‚ÄîSi no quieren problemas deben reconocer que debe existir voluntad política para resolver los problemas.
‚Äî¿Qué es lo primero que hizo al llegar a Puebla?
‚ÄîReunirme con mi familia, además viene el cumpleaños de mi esposa el 19 de febrero y ahí estaremos.





















Los 38 años de lucha
En 1972 el profesor Lorenzo Hernández Becerra fundó la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, siendo asesorado por jóvenes universitarios como Rubén Sarabia Sánchez ‚Äîque adoptó el alías de "Simitrio", inspirado en una película mexicana‚Äî además de participar otros personajes como Telésforo Zamorano.


Pocos años después desconocen al dirigente y surge la figura de "Simitrio"; las calles del Centro Histórico fueron tomadas por lo comerciantes, que se estima eran al menos 10 mil los ambulantes que se encontraban en la zona.


A mediados de los años 80 inició el reordenamiento comercial con la salida de la Central de Abasto de la zona de Analco, y se consulta a la 28 de Octubre el entonces presidente municipal Jorge Murad para la construcción de mercados.


El 1 de agosto de 1986 fueron desalojadas las calles y se firma un convenio, dando el control a Rubén Sarabia Sánchez, mientras la unión tiene nuevos miembros como los taxistas o inquilinos morosos.
Con el cambio de gobierno iniciaron los conflictos con el gobernador Mariano Piña Olaya, quien desconoció los acuerdos y comenzó la persecución en contra de los dirigentes.


El cateo y la siembra
En junio de 1989 la Policía tomó por asalto las oficinas de la organización 28 de Octubre un viernes por la tarde.
Lo medios de comunicación fueron invitados, pero los dejan fuera del local por espacio de dos horas. Cuando se permitió el ingreso de los reporteros las autoridades solicitaron el auxilio de un cerrajero y al abrir el escritorio de Rubén Sarabia sólo aparece marihuana; asimismo, el equipo antibombas saca una caja de madera de empaque con bombas molotov, pero éstas incluso están etiquetadas.
En el interior del inmueble detienen a dirigentes de la organización como Raúl Ronquillo y Guillermo Herrera Mora.
Rubén Sarabia es detenido días después, siendo acusado de secuestro, portación ilegal de armas, narcotráfico y asociación delictuosa, por lo que los jueces en Puebla lo sentencian más de 80 años de prisión.




Sin embargo, el dirigente ganó todos los juicios en las instancias federales quedando libre en abril de 2002, aunque las autoridades locales le prohibieron pisar el territorio poblano hasta 2013.


Rubén Sarabia encabezó una de las mayores manifestaciones en la segunda mitad del siglo XX congregando de 15 mil a 20 mil personas.