Uno de los símbolos de Acción Nacional en Puebla, Lupita de la Torre, advirtió que se está perdiendo la esencia del panismo tradicional ya que ahora se va por el interés y el cuánto ganarán; asimismo, reconoce que el gobernador Rafael Moreno Valle ‚Äîa quien repudió como priista‚Äî ya piensa y actúa como panista.


La mujer de tez blanca que nunca falta a una asamblea estatal o municipal del PAN, recuerda que en 1963 conoció personalmente a Manuel Gómez Morin, y que varios años después en su casa de la colonia Santiago hospedó a Felipe Calderón Hinojosa.
Alrededor de la mesa del comedor donde se realizó la entrevista se han sentado políticos como Felipe Calderón, Carlos Castillo Peraza, Eduardo Rivera Pérez y el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.


Guadalupe Montejano, mejor conocida como Lupita de la Torre ‚Äîapellido de su marido Pedro de la Torre, quien falleció hace cinco años siete meses‚Äî hace una autocrítica del partido al que pertenece desde hace más de medio siglo, cuando menos del 80 por ciento de los panistas habían nacido.


Sobre su ingreso al PAN señaló: "en 1958 en la campaña de Luis H. Álvarez ingresé al partido invitada por una amiga, hermana de uno de los fundadores del PAN en San Luis, era una época dura, al del gobernador Gonzalo N. Santos, un cacique de los meros malos.
"Inicié en el partido, en cada campaña éramos muy despreciados, tocábamos puertas o veíamos personas en la calle. A mí me decían que andaba perdiendo el tiempo, que me fuera a remendar calcetines, que ahora ya no se remiendan ni me lo dicen, ya le gente está más civilizada o tiene más consciencia política.


"Me inicie porque estando muy chica había un cacique que se llamaba Saturnino Zedillo, que llegó a ser ministro de Agricultura y gobernador de San Luis, era muy sanguinario, posteriormente lo asesinaron en su hacienda Las Palomas, a su hermana la sacrificaron.
Asimismo, recordó la herencia familiar: "mi papá Florencio Montejano estuvo metido en la campaña de Almazán, tuvo muchas agresiones, el contrincante era Manuel Ávila Camacho, vi cómo incendiaron un auto, mi papá platicaba y yo iba como representante de casilla, quien llegaba primero era el presidente de casilla, no había nombramientos.


"Lo que él nos platicaba y lo que veíamos era miedo el día de las elecciones, fue por lo que me entró la inquietud de la política y leyendo la revista La Nación y viendo los artículos de los fundadores, me interesó pertenecer al PAN.


Gómez Morin
En Puebla se podrán contar con los dedos de una mano quienes conocieron al fundador del PAN, entre otros fundadores, una de ellos es Lupita de la Torre.


"Tuve la dicha de conocer a Manuel Gómez Morin en 1963, además traté mucho como líder católico a don José González Torres, que fue candidato a la presidencia en 1964, lo mismo que Carlos Castillo Peraza, ya que era líder de una de las ramas de Acción Católica. Los hermanos Vicencio Abel y Astolfo y muchos más."


De Manuel Gómez Morin, recuerda:
"Era una persona bajita, su imagen impactaba porque era de una sonrisa tan amable que llamaba la atención. Ocurrió en una convención de noviembre de 1963 donde contendió José González Torres con Salvador Rosas Magallón.


"Me impactó la imagen, era tan amable, una sonrisa que no se le quitaba de los labios junto con la de don Efraín ‚Äîque era alto fornido‚Äî, en su trato, de esa gente que ya no hay. Además de otros fundadores, mi esposo Pedro de la Torre fue muchos años consejero nacional y siempre lo acompañaba a los consejos."


Su arribo a Puebla
"A Puebla llegue el 18 de octubre de 1974 invitada por Alejandro Cañedo ‚Äîque entonces era diputado federal‚Äî, él y Miguel Fernández del Campo los dos primeros diputados federales de mayoría. Alejandro era candidato a la presidencia municipal, me invitó, me vine y ya me quedé. Aclaro que no me siento poblana.


"Desde que llegué me inicié en la campaña de Alejandro, que era candidato a la presidencia municipal, y el ingeniero Luis Hinojosa ‚Äîpadre de Gabriel‚Äî era candidato a gobernador. Anduve con los dos en campaña después del fraude donde robaron 99 casillas."
Lupita de la Torre asegura que hay pruebas de esa represión en la época priista.


"Tengo fotografías de esa elección, de la forma salvaje en que rodeó el Ejército a cartucho cortado las calles donde había casillas.
"Se ganó la mayoría, pero Guillermo Morales Blumenkrón fue gobernador interino y no quiso reconocer el triunfo de Alejandro. Mi esposo lo fue a entrevistar, la respuesta fue ‚Äòles reconozco Jalpan pero Puebla no‚Äô.


"Seguí en la lucha, mi esposo enviudó en el 75 y en 1976 nos casamos, y seguí en las campañas donde él tenía que ser candidato porque nadie quería ser. Andábamos 15 para las doce tocando puertas para ver quién quería ser candidato, o era Manuel Iguiniz, Manuel Castillo Miranda o mi esposo, alguno de los panistas de aquella época.


"Para todos éramos unos ilusos que andábamos perdiendo el tiempo, y por ello seguí con él, pues era el eterno secretario general del partido, ¿quién pagaba la renta? Pedrito de la Torre, ¿quién pagaba el teléfono? Pedrito de la Torre.
"Seguí en el PAN, un tiempo me retiré por problemas de salud; él (Pedro de al Torre) falleció hace cinco años siete meses, cuando él faltó me reintegre.


Pierden identidad
La panista recuerda al panismo tradicional:
"Un grupo de mujeres, entre ellas Gloria Iguiniz y Rosario Huerta ‚Äîquien estuvo presa‚Äî, seguimos teniendo reuniones y nos juntábamos en el partido.


"Se formó la promoción política de la mujer con Rosalía Ramírez de Ortega, quien parecía guerrillera; Martha Sosa, Cristina Sánchez de la Barquera, Taide Samaniego de Castillo, entre otras, y después de la campaña de Ricardo Villa Escalera trabajamos.
"Seguimos durante seis años, cada viernes había una plática de gente de México, llegó gente de la talla de José González Torres, José Ángel Conchello, Jesús González Shmal, Cecilia Romero, Carlos Castillo y Felipe Calderón.


"En esta mesa que ve, si no era comida era cena, llegaron ellos a la plática, algunos de ellos, como Felipe Calderón, se hospedaron en la casa.
"En el 88 llegaron los yunquistas, entre ellos Francisco Fraile, entonces todo eso se acabó, se acabó la promoción política de la mujer ya no hubo reuniones ni conferencias.


"Quienes están ahora o son nuevas o van por diversión pero no por convicción o por interés. Todas reciben sueldo, yo nunca recibí sueldo, al contrario nos quitábamos el pan de la boca por darlo a nuestros hermanos de los municipios o apoyar a los candidatos."



Sin buscar el poder
De sus aspiraciones políticas señaló:
"Sólo fui suplente, nunca candidata, no me sentía con la inteligencia suficiente para estar en una tribuna, el tiempo que estuve en México, Manuel González Hinojosa ‚Äîpresidente en dos ocasiones del partido‚Äî quería que fuera su suplente. Nunca aspiré a un puesto, siempre anduve ayudando a todos en todas las campañas, fuera quien fuera el candidato.



"Esta casa era la de todos, fuera quien fuera el candidato de aquí se salía para hacer la propaganda, preparando el engrudo tradicional, pero la propaganda era triste.


El encuentro con Moreno Valle
Lupita de la Torre reconoce el trato que le dan en el PAN:
"Me respetan en el Comité Estatal y Juan Carlos Mondragón. En esta mesa durante la campaña estuvo Eduardo Rivera, Rafael Moreno Valle y Erika Alonso.


"Desde la campaña de Felipe Calderón formamos un grupo de diez mujeres, nos juntamos sin querer e invité a que se hiciera el plan de trabajo.


"En la campaña de Felipe se hizo un desayuno para Margarita Zavala, y fue cuando conocí a Moreno Valle, que iba como candidato a senador.


"Había un grupo de maestras, me dijeron ‚Äòél es Moreno Valle‚Äô, fui y le dije ‚Äòcomo persona lo respeto, como priista lo repudio‚Äô, su respuesta fue ‚Äòseñora no me diga eso, siempre tuvimos las puertas del PAN cerradas para quienes queríamos ingresar‚Äô, mi respuesta fue ‚Äòperdóneme que lo contradiga, pero mi esposo fue el eterno secretario del partido, y el día en que alguien se iba a inscribir hacíamos fiesta, porque era raro que alguien se registrara‚Äô.


"Tomé el micrófono para invitar a las maestras a ser representantes de casilla, y una maestra me dijo ‚Äòcuánto nos van a pagar‚Äô, quizás ellas pertenecían al PRI o a Moreno Valle.


Sobre si ha vuelto a ver Moreno Valle, respondió: "estuvo aquí cuando inició la campaña junto con su esposa, al igual que Eduardo, había cierta desconfianza, aunque de él como de su esposa, admiro la forma en que hablan del partido, siento son sinceros.
"Ella es una persona preparada y hablaba como las viejas panistas, siento que ya está convencido Moreno Valle porque dice ‚Äòmi partido‚Äô, siento que lo va a hacer bien como gobernador si tiene el apoyo."