Familiares y amigos, dieron el último adiós a Mariana Fuentes Soto, joven de apenas 20 años de edad, asesinada presuntamente en un asalto en la colonia Reforma Agua Azul.

El cortejo fúnebre partió discretamente desde la funeraria Camino al Cielo, donde fue velado su cuerpo todo el día de ayer, hasta el Panteón Municipal.

En este camposanto, los familiares pidieron a la prensa retirarse, no sin antes señalar sin grabadoras, que solo piden justicia y esclarecimiento del crimen.

De este modo, Mariana, en un ataúd blanco y en medio de amigos, familiares y una llovizna que simboliza la tristeza de su muerte, fue sepultada.

La joven estudiante de la facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), murió por un disparo en la cabeza en un aparente asalto.

Los primeros reportes señalan que la víctima se dirigía a la casa de unas amigas ya que sostendrían una reunión por la noche.

Fue privada de la vida en la colonia Reforma Agua Azul, alrededor de las 9 y media de la noche del pasado sábado 31 de septiembre.

Caminaba sobre la calle 45 A Poniente entre las calles 17 y 19 Sur, cuando fue interceptada por dos sujetos quienes intentaron arrebatarle sus pertenencias.

Pero al parecer en el forcejeo, uno de los delincuentes le dio un disparo en la cabeza, quitándole la vida de manera casi instantánea, según los paramédicos.

Después del crimen de Mariana Fuentes Soto, la Universidad Autónoma de Puebla, lamentó y condenó el asesinato de la joven estudiante. 

La máxima casa de estudios del estado, exhortó en un comunicado a las autoridades estatales y municipales, aclarar y castigar con todo el peso de la ley a él o los responsables del asesinato. 

Por su parte, el gobernador del estado, Antonio Gali Fayad, en su cuenta de twitter, le dió el pésame a la familia Fuentes Soto, asegurando que la Fiscalía General del estado (FGE) y la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM), trabajan para dar con los responsables.