La arquidiócesis de Puebla se sumará a los homenajes a las víctimas del sismo del 19 de septiembre de 2017, para ello habrá un retoque de campanas en punto de las 13:14 horas del 19 de septiembre hora en la que se desarrolló el fenómeno natural.

De acuerdo a la información dada a conocer por la arquidiócesis serán 29 los templos del Centro Histórico donde se dará el retoque, que consiste en un toque lento en señal de luto para recordar a las víctimas del sismo ocurrido hace dos años.

Hace dos años 226 templos resultaron dañados, pero para los católicos hubo un sufrimiento moral ya que perdieron imágenes de sus santos patronos como Santiaguito de Izúcar de Matamoros cuya imagen fue destruida al derrumbarse la cúpula del templo.

Hace dos años se informó que las comunidades fueron al rescate de sus imágenes, algunas sepultadas, y otras en inmuebles a punto de caerse, y las han trasladado a sitios seguros.

Del caso de la Virgen de los Remedios en Cholula, explicó que hay siete visitadoras y la original, esta última fue llevada por el sacerdote y los mayordomos a la capilla de los Mártires de San Pedro Cholula, sin que hubiera un solo problema ya que los fieles la quieren a salvo.

En el caso de Atlixco, la imagen del templo de la Natividad fue sacada en procesión para llevarla también  a otra capilla.

El momento más difícil

En entrevista al cumplir 10 años al frente de la arquidiócesis de Puebla, el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa al preguntarle cuál ha sido el momento más difícil que ha vivido desde el 2 de abril de 2009 cuando en el estadio Cuauhtémoc fue ordenado arzobispo, dijo que fueron los sismos que fueron muy duros para él como pastor de la iglesia en Puebla.

“Muchas comunidades se quedaron sin templos, muchos sacerdotes se quedaron sin casas parroquiales, muchas familias perdieron sus casas, se perdieron vidas, y es una preocupación de la pastoral social, de la iglesia y un servidor. Me afectó mucho ver a sacerdotes sin iglesia, sin sus casas. Esto ha marcado mis diez años en la parte negativa”.

El arzobispo comentó que no solo se perdieron imágenes sino espacios, monumentos del siglo XVI, “me duele ver cómo está el convento de Tochimilco, de Santo Domingo en Izúcar de Matamoros, el convento de Huaquechula, y es parte de lo que vamos viviendo, y los sismos nadie los puede predecir".

Comentó que hay sacerdotes que están durmiendo en la calle o con algún vecino ya que las casas parroquiales se derrumbaron.