Tras dos meses de que la planta automotriz Volkswagen suspendió labores en la planta de Puebla, por la pandemia mundial COVID-19, se mantiene la incertidumbre sobre si su personal volverá a trabajar en los primeros días de junio, de acuerdo al plan federal de la reactivación de la economía, mientras sus instalaciones lucen sin humanos y miles de unidades nuevas en sus patios, listas para salir al mercado.

Durante un recorrido realizado la mañana de éste martes a los alrededores de la planta ubicada en San Lorenzo Almecatla, se pudo apreciar una zona abandonada, sólo se llegan a ver algún vigilante a lo lejos, pero la actividad normal que reúne a miles de personas cada día.

La planta automotriz da empleo de manera directa a más de 14 mil personas, que laboran en las diferentes líneas de producción y que desde el 21 de marzo la mayoría se encuentra en confinamiento voluntario para evitar algún contagio, luego de que fue en esa empresa donde se presentó el primer caso de un paciente COVID-19 en Puebla.

De acuerdo con el recorrido en los patios de la armadora alemana hay miles de vehículos nuevos en sus patios, algunos cubiertos para protegerlos de las inclemencias del clima, pero otros que dan con el Parque FINSA principalmente camionetas Tiguan, están a la intemperie, sólo con la sombra de los árboles.

El pasado lunes los directivos de la empresa automotriz enviaron un comunicado dirigido al gobierno del estado para señalarle que cuentan con las condiciones de seguridad e higiene para evitar un brote.

Trabajadores en confinamiento

A diferencia de algunas colonias que se han visitado, en las cuales las personas no respetan el confinamiento, en las dos unidades habitacionales de trabajadores que están cerca de la planta, las calles se ven vacías, y nula actividad en el exterior.

Los cerca de tres mil trabajadores que ahí viven según información del encargado de una caseta donde se venden alimentos, se ha respetado la cuarentena, aunque ello significa que sus ventas cayeron a la mitad.