Derivado de la pandemia, el porcentaje de personas que viven en la extrema pobreza en los 47 países menos desarrollados del mundo pasará de 32.2% a 35.2%, lo que representa un incremento de 32 millones de personas, advirtió un informe de Naciones Unidas.

De acuerdo al informe de la Conferencia de la ONU para el Comercio y el Desarrollo, estos países pudieron sortear desafíos sanitarios de la pandemia, pero las consecuencias económicas han sido “ruinosas”.

El organismo explicó que se prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) de estos países, en su mayoría africanos, aunque también hay naciones de Asia, Oceanía y una americana, baje hasta 0.4%, cuando hace un año se estimaba que tuvieran un crecimiento de 5 por ciento.

Dicha situación supone un revés para las perspectivas de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible así como otros propósitos relacionados a la educación, salud y la igualdad de género en estos países.

La finalidad del informe es llamar la atención de la comunidad internacional para que apoye económicamente a estos países, empezando por mejorar sus capacidades productivas, que son el elemento principal para conseguir su desarrollo.