La NASA realizó la primera prueba del Space Launch System (SLS), el cohete más potente que jamás ha construido, en el centro espacial John C. Stennis de la agencia estadounidense, en Misisipi.

La prueba consistió en encender los cuatro motores RS-25 simultáneamente durante 8 minutos para simular el rendimiento de la etapa central del cohete durante el lanzamiento.

El ensayo comenzó sin problemas, con nubes de humo blanco que salían disparadas del centro de pruebas, pero los motores se apagaron alrededor de 1 minuto y 15 segundos después, muestra un video, publicado por la NASA.

La agencia espacial destacó que había recibido una cantidad significativa de información sobre los motores del cohete y señaló que los especialistas están "revisando los datos relativos al apagón temprano de los motores".

El SLS es el único cohete que puede llevar a la Luna la nueva nave espacial Orion, astronautas y suministros en una sola misión, por lo que representa la columna vertebral del programa Artemis. Su objetivo es "volver a la Luna de una forma sostenible para preparar el próximo salto gigante: enviar por primera vez astronautas a Marte". La agencia pretende llevar a la primera mujer y al próximo hombre a la Luna en 2024.

Es un poco más corto que los cohetes Saturno V que llevaron a los astronautas del programa Apolo a la Luna, pero es más potente, ya que producirá un 15% más de empuje durante el despegue y el ascenso comparado con su predecesor, informa Live Science.
 

Con información de RT.