Las obras de concreto hidráulico del Camino a Tlaltepango han presentado complicaciones que han impedido su terminación por la gran cantidad de ductos de Pemex que pasan por el lugar.

A pesar de que se lleva un avance de 95 por ciento en esta obra, la tardanza por parte de la paraestatal para entregar los últimos permisos al ayuntamiento de Puebla para intervenir algunos tramos pendientes ha hecho que la obra se detenga.

Este retraso lleva poco más de un mes, derivado de que en un tramo de 100 metros de longitud Pemex detuvo los trabajos de pavimentación para que no se dañaran las tuberías que transportan el combustible.

Por ello, la autoridad municipal no puede intervenir sin la autorización correspondiente zonas donde pasan estos ductos que conducen combustible por esta zona de la ciudad, que es donde más instalaciones pasan por colonias aledañas a la vialidad.

Al respecto, el director de Obra Pública de la comuna poblana, Miguel Ángel Macip Molina, destacó que por disposición de Petróleos Mexicanos (Pemex) la terminación de la pavimentación con concreto hidráulico del Camino a Tlaltepango se ha retrasado, ya que no han entregado los permisos correspondientes para pavimentar una zona donde pasan unos ductos de combustible.

Macip Molina confirmó que este tramo suspendido se encuentra a la altura del 0+300 al 0+400, y que abarca 100 metros lineales por los seis metros de ancho, es decir, ubicada a la altura de la gasolinera y un centro comercial.

“Estamos detenidos como 100 metros que no los hemos podido terminar por los permisos ante Pemex, ya nos dijeron que esta semana, a más tardar el día viernes, nos va a entregar el permiso para terminar la vialidad, ahí atraviesan los ductos, en una franja como de 20 metros, pero tenemos que dejar todo abierto hasta que ellos nos permitan y poder dejarlos trabajar.”

Macip Molina explicó que en sí el ducto abarca un espacio de 15 metros, sin embargo, la obra abarca hasta 100 metros lineales debido a que se deben realizar unas trincheras que son estructuras que exige la transnacional para poder colocar un camino por este estas zonas, como una forma de seguridad y evitar alguna fuga o una perforación de estos ductos.

“Ya en estas trincheras, se pone una plancha de cemento, se vuelven a rellenar de arena y de ahí va el concreto hidráulico, pero tenemos que esperar las indicaciones de la paraestatal para poder proseguir los trabajos.”

El funcionario municipal agregó que durante toda la obra algunos inspectores de la petroquímica supervisan de manera constante la obra, así como celadores que las 24 horas vigilan que la obra cumpla con los requisitos que exigen para una obra cercana a una despachadora de combustible.

Sin embargo, el encargado de la Obra Pública en la capital confió en que a más tardar este viernes Pemex entregue los permisos correspondientes para concluir la obra, ya que sólo falta este tramo, así como las guarniciones y banquetas, que en estos momentos ya están en su última etapa.

Por lo tanto, si no existe otro retraso, se pretende entregarla durante la primera quincena del mes de septiembre, teniendo un mínimo retraso en su ejecución.