El ayuntamiento de Puebla heredará a la siguiente administración un relleno sanitario con tiempo de vida útil hasta el 2023. Sin embargo, en este momento el tiempo de vida se encuentra en los 18 meses porque, hasta el momento, no se han liberado los permisos federales para ocupar 17 hectáreas de la zona, que servirán como el proyecto de expansión de este espacio que recibe mil 600 toneladas diarias de basura.

Al respecto, el secretario de Medio Ambiente del municipio, Alejandro Fabre Bandini, detalló que están en trámite los permisos ante instancias federales para la segunda etapa de expansión del relleno sanitario de Chiltepeque, con lo se ocupará una celda adicional.

Asimismo, explicó que, toda vez que se encuentra inhabilitada la Celda A —que llegó al término en su tiempo de vida—, la Celda B es la que se está ocupando actualmente y que alcanza únicamente para recibir los desechos de la ciudad por 18 meses.

Fabre Bandini recalcó que por esta urgencia de un espacio adicional es que se han comenzado a gestionar los permisos federales para ocupar 17 hectáreas de terreno adicionales para la creación de una Celda C, con una inversión de 10 millones de pesos.

El funcionario aseguró que esto permitirá heredar a la próxima administración municipal un relleno sanitario utilizable hasta el 2023, situación que se busca concretar en los próximos tres meses, una vez que se adquieran las autorizaciones federales.