El titular de la Secretaría de Gobernación municipal, Guillermo Aréchiga Santamaría, consideró que una salida viable puede ser entubar el vaso regulador del Puente Negro, con la finalidad de disminuir riesgos de afectaciones, como las que se registraron en semana pasadas, producto de las intensas precipitaciones pluviales en la capital del estado de Puebla.
Están, dijo, en el análisis de las diferentes propuestas que tienen los tres órdenes de gobierno porque, para consolidar el proyecto, se requiere de la suma de esfuerzos económicos que las autoridades capitalinas están dispuestas en consolidar.
El funcionario capitalino recordó que la última acción que se llevó a cabo, de esa naturaleza, fue entubar el río San Francisco, que se hizo en los años 90, aunque una parte quedó inconclusa, por eso dijo que no se descarta la posibilidad de entubar el vaso regulador del Puente Negro pero con un trabajo coordinado con las autoridades gubernamentales, municipales, federales y estatales, pero también con la portación de las comunidades de las zonas de la Malinche porque se necesita una fuerte inversión en infraestructura.
A decir de Aréchiga Santamaría, las lluvias atípicas que se registraron en semanas pasadas en la capital poblana pusieron a prueba la infraestructura de la ciudad y aunque se registraron algunas complicaciones se logró superar la contingencia, pero tienen que estar preparados para el futuro inmediato, donde todavía se prevén fuertes precipitaciones pluviales.
Ya funciona el vaso regulador
Aréchiga Santamaría aseguró que el vaso regulador del Puente Negro ya funciona de manera normal porque se logró retirar más de 80 toneladas de basura y solamente de la parte interior del tubo se retiró una tonelada de desechos.
“El clima ha cambiado, resultado del deterioro ambiental tenemos que reconocerlo, las lluvias son atípicas, el nivel de agua fue de 55 milímetros en muy poco tiempo; el agua que cayó pone a prueba los drenajes, las obras hidráulicas que tiene la ciudad, hay que recordar que Puebla es cruzada por tres ríos: Alseseca, San Francisco —éste, que pasa abajo del bulevar 5 de Mayo— y el Atoyac, y considerando que estos ríos vienen de las montañas de la Malinche, de los cerros de Loreto y Guadalupe, significa todo un reto para los sistemas de obra hidráulica”.
Por eso, dijo, el presidente municipal José Antonio Gali Fayad ya lo puso en la agenda: “Ya están trabajando las áreas que corresponden pensando en obras de infraestructura que permitan tener mayor seguridad en lo que se refiere al tema de desagüe en la ciudad es un proyecto que se está analizando, no tengo los costos pero va a convocar un esfuerzo de los tres órdenes de gobierno para una obra de esta magnitud”.
