Tras el homicidio del pasado fin de semana en el ruta 65, el presidente municipal del estado, Luis Banck Serrato precisó que ya tiene identificado a los responsables, asimismo ponderó el trabajo que realiza su gobierno junto con la administración estatal en la conformación de un historial para atacar de manera eficiente los hechos en los cuales han perdido la vida 2 personas, la primera hace un par de semanas en el ruta 19.
Detalló que derivado de los operativos conoce que la banda de asaltantes y criminales se conforma por 3 sujetos: “Estamos reforzando la coordinación con el gobierno del estado para poder revisar tanto el historial de los chóferes, como el modus operandi de los asaltantes en diez rutas que han sido las más impactadas por estos delitos en los últimas semanas”, puntualizó el alcalde.
Explicó que los violadores de la ley y buen gobierno operan preferentemente en la zona norte del municipio más importante del estado, pero aclaró que aunque no se conoce si los sujetos son de otros estados o son poblanos serán sometidos a la brevedad posible.
Los operativos de efectivos de la secretaría de seguridad municipal ya comienzan a responder a las exceptivas de la población que no debe tener miedo al momento de abordar las unidades del transporte colectivo.
“Estamos en búsqueda de este grupo que ya fue identificado”, apuntó el alcalde, luego de insistir que los operativos municipales van por buen camino porque ya se conocen a los integrantes de dicha pandilla.
En tanto, advirtió que su gobierno invertirá en tecnología para evitar que los asaltantes continúen con una carrera ascendente en la capital poblana.
Nerviosismo entre el sector empresarial
Entrevistados de manera individual, tanto el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Montiel Solana como el dirigente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur), Marco Antonio Prósperi Calderón, aseguraron que el sentir de los empresarios poblanos después del segundo asesinato de un pasajero del servicio colectivo es de nerviosismo.
Montiel Solana dijo que las autoridades del estado y municipio deben tomar el control de la situación para evitar que la ola de inseguridad se incremente, pero sobre todo, para dar certeza a la población.
Consideró que en la guerra contra la delincuencia los ciudadanos deben intervenir a través de las denuncias constantes para que las autoridades tengan un panorama amplio de cada uno de los puntos donde deben intervenir.
“Es el momento de que todos participemos ante esta inestabilidad de seguridad que se vive, los ciudadanos deben realizar sus denuncias, al igual que comerciantes afectados, aquí todos debemos participar”.
Destacó que el gobierno estatal y municipal debe enfocar programas eficientes para desalentar a la delincuencia, pero sobre todo, mantenerlos bien enfocados.
Carlos Montiel destacó que los crímenes son una muestra de que la administración estatal y municipal tiene que trabajar horas extras para devolver la confianza al grueso de la población que usa el transporte público para trasladarse.
En tanto, el dirigente de la Canaco, Marco Antonio Prósperi, destacó que los índices delictivos que le pegan a la comunidad y a los empresarios se debe atacar de forma intermunicipal porque el estado pertenece a un zona conurbada en donde más de siete presidentes municipales y el gobernador deben trabajar armónicamente en beneficio de los poblanos.
Prósperi Calderón reveló que el fin de semana para sus amigos y familiares fue malo porque le reportaron más de tres asaltos a casas habitación, además de negocios: “En Puebla la percepción y, digo la percepción porque luego se mal interpreta, en torno a la seguridad de acuerdo al INEGI va en aumento, pero esto las autoridades lo pueden revertir con buenos programas de seguridad que deben trabajar de forma conjunta porque vivimos en una zona conurbada”.
Asimismo, advirtió que el gobierno del alcalde Banck y el de Moreno Valle deben tomar la batuta para devolver la confianza a los poblanos que usan los colectivos para evitar situaciones que se salgan de control como ocurre en estados violentos como el Estado de México en algunos municipios del estado donde la población imparte justicia por su propia mano.