Catrinas elegantes, acompañadas a ritmo de mariache, impregnaron a Puebla de la tradicional fiesta mexicana de cosmovisión y cultura ante la muerte. Más de mil jóvenes desfilaron este viernes por las principales calles del Centro Histórico para mantener presente el Día de Muertos.
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El muralista Diego Rivera fue quien bautizó a la dama vestida de blanco como catrina pero fue José Guadalupe Posada el precursor de esta representación quien logró que se arraigara la tradición en territorio nacional para conmemorar los días de muertos.
La historia de la catrina comenzó durante los gobiernos de Benito Juárez, Sebastián Lerdo de Tejada y Porfirio Díaz pero con textos para satirizar a los políticos, con ese matiz sarcástico los mexicanos y poblanos festejan sus muertos.
El desfile fue multicolor por los matices de los trajes de cada uno de los participantes de las escuelas de arte del IMACP, así como de los chicos y chicas de la Universidad Autónoma de Puebla y de las escuelas El Chamizal y del Instituto Washington.
El contingente partió de la avenida Juan de Palafox y Mendoza hasta alcanzar el bulevar 5 de Mayo, posteriormente llegó a la 7 Oriente para alcanzar la 5 Poniente a donde se incorporó a la avenida Reforma para concluirlo en el sitio de partida.
En camiones alegóricos las catrinas perfectamente ataviadas lanzaban besos a los cientos de personas que se congregaron para grabar esos momentos.
Los chicos de la escuela de Artes Circenses de la alcaldía, con sus actos, recordaron a los presentes que los malabaristas también deben estar presentes en el periodo de la festividad poblana.
Los aros con llamas por donde pasaban volando algunos catrines representaron esa parte jocosa del infierno que causa hilaridad entre los mexicanos.
Mariachis que regresaron de mundo de los muertos para entonar la música mexicana provocaron que los asistentes entonaran las canciones. El Son de La Negra fue coreado al paso de los músicos que alentaba a las catrinas a mantener ese paso elegante.
Tradición que se mantiene viva
El rector de la UAP, Alfonso Esparza Ortiz y la directora del IMACP, Anel Nochebuena, dieron la señal de salida a los más de mil jóvenes que participaron en el festival La Muerte es un Sueño.
Alfonso Esparza Ortiz dijo que el desfile de las catrinas en Puebla demuestra que los poblanos prefieren las festividades nacionales al Halloween.
En su momento la directora del IMACP, Anel Nochebuena destacó que el desfile confirma que las tradiciones nacionales siguen más vivas que nunca por el colorido y la tradición cultural que representan en la población.
“La ciudadanía se ha sumado. Estamos muy orgullosos porque se está haciendo un trabajo muy fuerte para conservar nuestras tradiciones; además estamos rescatando las tradiciones con la participación de estudiantes y ciudadanos”, ponderó.
La directora del área cultural del ayuntamiento ve a una comunidad más activa en todos los festivales culturales que la alcaldía viene realizando anualmente como lo es el desfile de Catrinas 2016 que en esta ocasión compartió con la UAP.
Nochebuena agradeció al rector, Esparza Ortiz, su participación y por arraigar estas tradiciones entre la juventud poblana.
El regreso de los aztecas
Uno de los contingentes de la escuela de artes del IMACP que causó la atención de turistas fue el de los aztecas. Los alumnos ataviados con taparrabos multicolores y penachos, lograron que los turistas corrieran para tomarse la foto del recuerdo.
