Ante la falta de seriedad de las autoridades estatales y municipales para reactivar la economía, Puebla comenzará a sentir en la ausencia de recursos y el incremento de desempleos, porque comerciantes han optado por migrar a Querétaro, Tlaxcala y a Oaxaca para evitar que la crisis del Covid-19 los deje en bancarrota. 

El presidente del Consejo de Comerciantes Establecidos del Centro Histórico, José Juan Ayala Velázquez proyectó que bajarán la cortina definitivamente mil negocios antes del uno de agosto próximo y cuatro mil familias se quedarán son sustento. 

Aclaró que algunos propietarios de establecimientos reabrirán pero  con cambios de giros comerciales y otros mantendrán su vocación inicial.

Recordó que los negocios prácticamente suman cuatro meses cerrados, porque las autoridades han fallado en sus programas para enfrentar positivamente la pandemia, al no realizar acciones contundentes que involucren a los ciudadanos en protegerse cuando salgan de sus  casas. 

Lamentó que mientras autoridades de otros estados, entre ellos, Ciudad de México, con peores cifras de contagios y decesos por el Coronavirus, han permitido la reapertura comercial, en Puebla no puedan con un escenario menor.