Después de revelar que no acudió con alguna autoridad de otra instancia gubernamental ni del orden judicial para frenar la construcción donde ocurrió la explosión derivada por ordeña a ductos de Pemex, el alcalde subalterno de San Pablo Xochimehucan, Paulo César Juárez González, refrendó que la entonces Directora de Atención Vecinal y Comunitaria de la Sego del gobierno morenista, Elisa Molina Rivera, y el secretario de Gobernación, René Sánchez Galindo, se quedaron con los brazos cruzados.
Pero confió que el gobierno de Eduardo Rivera Pérez, al contar con experiencia y con el trabajo conjunto que realiza con el gobierno estatal, podrá desalojar entre siete y nueve personas que se ostentan como dueños del predio.
Recordó que ese predio era de una señora que construyó una especie de bodegas hace más de 20 años y la superficie que sobró se la regaló al pueblo de San Pablo Xochimehucan por agradecimiento y humanidad, relató.
Puntualizó que entregó el oficio el 21 se septiembre de 2020 previo a la ahora regidora de Morena, pero nunca recibo respuesta de la entonces autoridad.
Juárez González reveló que por esos días se entrevistó con el exsecretsrio de Gobernación, René Sánchez Galindo, quien le indicó que se encargaría de realizar acciones contundente para evitar esas construcciones de madera y cartón.
Esas personas con materiales reciclables, dijo, levantaron unas casas, al estilo de paracaidistas, pero como nadie les pidió que se marcharán construyeron con material adecuado.
"La propiedad era muy codiciada y siempre se la quisieron agenciar porque durante años no estuvo cuidada (por las autoridades municipales). Él dijo que le iban a dar solución por la dirección correcta".
En contra parte, reveló, que recibió la visita de entre 12 y personas que le pidieron entregar una constancia para amparar la propiedad, pero no entregó nada por estar imposibilitado jurídicamente.
"Esas acciones corresponden a la autoridad o al juez de paz que durante el gobierno de Claudia Rivera Vivanco, siempre se nos negó", dijo.
Paulo César Juárez, lamentó que en ese encuentro le indicaran que no se metiera, "no son personas común y corrientes, son de armas tomar, sí me amenazaron".
Aclaró que no tiene bases para señalar que ese grupo de personas este involucrado en la ordeña a los ductos de Pemex.