Ante la proximidad de la Semana Santa, acompañada por la procesión del Viernes Santo, el alcalde Adán Domínguez Sánchez, advirtió que el diseño de la peatonalización de la 16 de Septiembre, contempla el espacio y la apertura suficiente para desarrollar la celebración sin ningún incidente.
Pero, aclaró, que no se requiere de una reingeniería de la procesión, que sale del atrio de la Catedral Metropolitana de Puebla.
Subrayó que este proyecto del corredor de la 16 de septiembre, desde su origen contempló a la procesión de Viernes Santo por la apertura de la calle para que las imágenes, cargadas por los porteadores puedan salir libremente.
Anunció que previo a la Procesión de Viernes Santo, las cuadrillas de la Administración municipal retirarán momentáneamente los bolardos, las bancas, los maceteros y otras herramientas que existen en ese panorama urbano, pero al concluir inmediatamente se volverán a instalar.
Domínguez Sánchez insistió que anualmente, semanas previas al desarrollo de la posesión, la autoridad municipal y los representantes del comité organizador tienen una serie de reuniones para cerrar el círculo de la logística para evitar cualquier incidente a los miles y miles de cristianos y turistas, que vienen exclusivamente a participar en esta procesión.
Consideró que sí existe alguna inquietud tanto el Comité Organizador como el gobierno de la ciudad, darán a conocer la definición o definiciones que se obtengan en las mesas de trabajo, y se direccionan en beneficio de la Procesión de Viernes Santo.