Al llamar a no caer en la indiferencia ante la violencia extrema que se vive en México, llamó el Arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, lamentó que en territorio nacional se siga derramando sangre, como ocurrió esta madrugada en Tabasco en donde un comando armado ejecutó al menos a seis personas al interior de un bar.

Monseñor, recordó no solo a los cristianos, sino a la comunidad en general que no puede pasarse por alto ese desprecio a la vida que se nota en los 32 estados de la República y en varios países del globo.

"No solo es Tabasco, es Michoacán, es Culiacán, es Puebla; son todos los estados y es triste estar hablando de estos hechos violentos que están sucediendo todos los días en nuestro país".

Reveló que esta mañana cuando prendió la radio y la televisión escuchó en las noticias la violencia extrema que ocurrió en Tabasco esta madrugada en donde un grupo armado irrumpió en un bar para matar al menos a seis jóvenes que se encontraban al interior.

"Hemos reflexionado en estos últimos domingos, que se ha derramado mucha sangre en nuestro país, cada día se derrama mucha sangre; hoy tempranito, cuando me levanté prendí la radio y el televisor para ver las noticias Tabasco, y así es en todos lados, es Michoacán, es Culiacán, es Puebla, es en todos lados. Esto es triste, pero es nuestra situación, es lo que estamos viviendo".

Bajo ese panorama violento, recordó que el Papa Francisco ha pedido que no se puede ser parte de esa globalización de la indiferencia sobre la violencia que está arropando al mundo.

"Hace ocho días indiqué que qué desprecio tan terrible a la vid, lo que nos dicen las noticias; los secuestraron, los desaparecieron, los atormentaron, los mataron, los descuartizaron y los quemaron".

Sánchez Espinosa priorizó que este terrible desprecio a la vida, a la dignidad de la persona se observa con los desaparecieron, atormentaron, mataron, descuartizaron, los quemaron y los fueron tirando,.

"Hoy en la mañana fue Tabasco, estamos viendo una situación muy muy difícil que hay queridos hermanos, no nos tenemos que acostumbrar a esto. El Papa Francisco nos dijo 'no entremos a la globalización de más indiferencia', no seamos indiferentes en lo que está pasando en el mundo y México".