Al lamentar el clima de violencia que se vive en territorio nacional, el Obispo Auxiliar Tomás López Durán de la Arquidiócesis de Puebla, reprobó las ejecuciones de José Miguel Flores Lara en Amozoc; de Teresa González Murillo, madre buscadora en Guadalajara; de Heriberto Navarrete López, joven de la Pastoral Juvenil de Irapuato en Pénjamo, Guanajuato.
Desde la Basílica Catedral Metropolitana de Puebla, realizó una oración especial por las necesidades de los colectivos de las madres y padres buscadores, que en las últimas semanas han tenido que desplazarse a más de un estado de la República para tratar de encontrar a sus hijas, hijos y seres queridos.
Recordó que esta violencia extrema actual, la vivió también Jesús en su época al observar como maltrataban y ejecutaban a personas inocentes, además, de como algunas personas también mataban a ciudadanos de su propio pueblo por no entender y comprender los preceptos de Dios.
Ejemplificó que durante la última Cuaresma de Jesús en la Tierra, un grupo de Fariseos y de judíos malintencionados se le acercaron Para indicarle que la ley del 6 indicaba que se tenía que apetear hasta la muerte a una mujer que cometiera adulterio, pero omitieron que la ley también indicaba que "el castigo debe ser para el hombre también no solo para la mujer" Por eso Jesús respondió, el que esté libre de pecado que arroje, la primera piedra.
Confió en que durante esta época de Cuaresma, la paz y tranquilidad se restablezca en México para evitar el dolor y la incertidumbre a las familias mexicanas.
Reprobó que organizaciones de madres y padres buscadores, se enteten todos los días sobre de desapariciones forzadas y ejecución de mujeres, jóvenes, adultos o de seres queridos.