El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este domingo que su país no estuvo involucrado en el reciente ataque de Israel contra Irán, ocurrido la noche anterior, y advirtió que cualquier agresión iraní contra territorio estadounidense provocaría una respuesta militar “a niveles nunca antes vistos”.

“Estados Unidos no tuvo nada que ver con el ataque a Irán de esta noche”, afirmó el republicano en un mensaje publicado en su red Truth Social. No obstante, advirtió: “Si Irán nos ataca de cualquier forma, la fuerza y el poderío de las Fuerzas Armadas estadounidenses caerán sobre ustedes”.

En un tono menos beligerante, Trump también planteó la posibilidad de mediar entre las partes en conflicto: “Podemos llegar fácilmente a un acuerdo entre Irán e Israel y poner fin a este sangriento conflicto”, agregó.

Sus declaraciones contrastan con las del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien horas antes aseguró que las operaciones militares de su país contra objetivos iraníes se realizan con el “claro apoyo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump”, según un mensaje difundido por su oficina.

Este cruce de versiones ocurre mientras se pospuso una reunión programada para este domingo entre representantes de Estados Unidos e Irán en Omán, donde se discutiría el futuro del plan nuclear iraní. A pesar de la cancelación, un alto funcionario estadounidense aseguró que Washington sigue “comprometido” con las conversaciones diplomáticas. “Esperamos que los iraníes se sienten pronto a la mesa”, dijo en un comunicado.

El episodio añade tensión a un conflicto que ha escalado rápidamente en los últimos días tras el intercambio de ataques directos entre Israel y la República Islámica.