Al deplorar la ejecución de siete jóvenes cristianos en San Bartolo de Berrio, San Felipe, Guanajuato, el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis, Francisco Javier Martínez Castillo, urgió a alejarse de la cultura del relativismo, de las ideologías que denigran a mujeres y a hombres, pero también a alejarse de la barbarie y la violencia.
Desde la Basílica Catedral Metropolitana de Puebla, realizó también una oración especial por el descanso eterno de América Yamileth Sánchez y Adal Jair Marcos, cadete y marino de la Marina de México, quienes perdieron la vida el sábado 17 de este mayo, al colisionar el buque Cuauhtémoc con la estructura del puente de Brooklyn.
Monseñor insistió que la cultura del relativismo aleja a las personas de los valores y solidaridad porque cada quien se quiere alzar con la bandera de su verdad en lo que piensa, en lo que quiere y en lo que le gusta.
El relativismo dispone de todas las personas para masificarlas y unirlas a las acciones que el poderoso quiere realizar alejado de los valores y de la fraternidad con el prójimo.
Advirtió que la manipulación de las personas genera el olvido de acciones positivas entre la comunidad, pero en contra parte, genera una sociedad donde la barbería va destruyendo la educación, la cultura, los valores y la sacralidad de la vida; al permitir a la población vivir la mejor experiencia de unión, respeto y ayuda a los más necesitados.
"La mejor experiencia, es donde el amor que nosotros le tenemos a Dios se tiene que manifestar. Nosotros tenemos que permitirnos que la palabra de Dios la pongamos en práctica con una profunda convicción desde lo más profundo del ser".
Durante su mensaje insistió en que cada persona necesita construir y favorecer un ambiente positivo en el que se pueda tener esa experiencia positiva de Dios para ser solidarios con las personas, sin importar la condición en la que se encuentren.