El capítulo del Movimiento de 1968 en la historia de México, protagonizado por Gustavo Díaz Ordaz, es fundamental para entender lo que pasó después, “que la sangre de los estudiantes y las expresiones en contra de los regímenes autoritarios, significaron la idea de construir una vida democrática”, expresó la distinguida periodista Carmen Aristegui.

Durante la presentación del libro “Díaz Ordaz: disparos en la oscuridad”, de Fabrizio Mejía Madrid, editada por Suma, que se presentó en el Salón Barroco del Edificio Carolino de la UAP, dijo la vida de este personaje emblemático lleva a un gran retrato del ejercicio del poder en el país.

Destacó que a través de 300 páginas el autor presenta un recorrido y la posibilidad de conocer a este personaje, “ayuda a conocer mejor a un protagonista siniestramente fascinante que terminó devorado por sí mismo, en la soledad, paranoia y alucinación, en lo que termina por suceder a quien ejerce y entiende el poder no para el bien común, sino para el control”.

Julio Glocker, investigador del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades “Alfonso Vélez Pliego” de la UAP, comentó que “es una novela histórica que relata en forma documentada la vida de un hombre que supo insertarse en un sistema político corrompido y autoritario, donde fue ganando gradualmente la confianza de individuos poderosos, para ir abriendo su propio camino hacia puestos importantes que culminaron en la presidencia de la República”.

Explicó que esta obra tiene una especie de primer plano que transcurre entre julio y septiembre de 1977, en el que se describe con detalle y en tono sarcástico la decadencia física y mental del personaje hasta su muerte.

Después, el escritor relata la vida familiar, social y política del protagonista, así como una aguda inspección psicológica de su personalidad, para tener así un retrato completo de Díaz Ordaz por dentro y por fuera.

Por su parte Aurelio Fernández, Director del Periódico La Jornada de Oriente, indicó que este libro es una afrenta contra el diazordacismo, pensamiento vigente aún, porque las crisis de inseguridad y empleo que se viven tientan a las personas a aceptar soluciones autoritarias al máximo.

Fabrizio Mejía Madrid transporta al lector a esa parte oscura de la condición humana de este personaje, “en cada página del libro encuentra una explicación al insano apetito de poder, de la voracidad por el dinero, del abuso incesante de la gente más débil, de la mentira y traición, la calumnia e impunidad”.

Declaró que esta situación no ha cambiado desde los tiempos en que gobernó Díaz Ordaz, “lo que si cambió y empezó en 1968 es la lucha por una mejor respuesta por la sociedad, que refleja a una población menos tolerante a la arbitrariedad”.

En su intervención el autor de “Díaz Ordaz: disparos en la oscuridad”, añadió que sólo a través del cine, la literatura y el arte plástico se puede enjuiciar a los personajes poderosos.

Fabrizio Mejía Madrid es colaborador en las revistas Proceso, Letras libres y Gatopardo, entre otras publicaciones. Es ganador del Premio Xavier Villaurrutia y escritor de las novelas “Pequeños actos de desobediencia civil” (1996), “Entre las sábanas” (1995) y “Salida de emergencia” (2007).