Indicó que nadie se deja engañar por pretextos ecologistas, porque los intereses sectarios pretenden prohibir el espectáculo taurino al tiempo que se blindan los “correbous”, mucho más crueles hacia el animal.
Reciben el nombre de “correbous” una serie de fiestas taurinas tradicionales, realizadas en Cataluña, en las que se ata al toro por las patas y el rabo, inmovilizándolo, para ponerle antorchas o bolas inflamables en los cuernos y luego soltarlo en las calles, mientras corre despavorido.
El ABC puntualizó que “lisa y llanamente, se trata de un gesto de hostilidad hacia España por parte de un nacionalismo que se atribuye el monopolio de Cataluña, ignorando una parte sustancial de su historia y su realidad social”.
Aseveró que los toros se identifican con una fiesta española y el único objetivo es marcar distancias y expulsar del territorio catalán todo aquello que pueda asociarse con una cultura común de la nación.
“Ante semejante despropósito no sirven los argumentos culturales que apelan al carácter universal de la tauromaquia, a sus profundas raíces mediterráneas y a su presencia destacada en las manifestaciones artísticas del más alto nivel”, dijo.
Para el diario español, los nacionalismos identitarios sólo miran hacia su propio ombligo y ejercen en cuanto pueden una represión implacable contra cualquier expresión de pluralismo social y cultural.
“La libertad siempre sale perjudicada cuando se imponen prohibiciones indiscriminadas, pero eso tampoco importa, ni mucho ni poco, porque –como sucede con el asunto de las lenguas-, la falsa identidad de la tribu se sitúa por encima de los derechos de la persona”, anotó.
Por último, el ABC hizo hincapié en que este domingo se celebra la última corrida en la Monumental pero no es descartable que a medio plazo se imponga el sentido común y regrese a la capital catalana un espectáculo de máxima dimensión cultural.