Ni el doblete del ‘joven’ Raúl, ni un Schalke que dominó buena parte del partido pudo con este Athletic que aún no tiene techo. El conjunto de Marcelo Bielsa supo aprovechar sus ocasiones, y resistió los envites del conjunto alemán, que aguantó mientras el delantero español tuvo fuerzas.

Timo Hildebrand falló estrepitosamente en la reacción al despeje de un disparo de Ander, que al no atraparla permitió queFernando Llorente metiera la pierna para aprovechar el regalo. La alegría del Athletic sólo duró un minuto. Uchida vio cómo el incombustible Raúl tiraba el desmarque y, con un preciso centro, le puso un balón en el primer palo que el ex capitán madridista no desaprovechó. 

El Schalke culminó una primera parte con autoridad y sin demasiados problemas, mientras que el Athletic hizo bueno el tanto de su ‘9′, que sigue en estado de gracia.

En la segunda parte, la lesión que Hildebrand obligó a salir al segundo portero, Schober, que le tocó lidiar con los Llorente, De Marcos y compañía. 

Por parte del Athletic también hubo cambios para la segunda aprte, y se retiró Ander Herrera, tocado físicamente, sustituido por Ibai Gómez. Las sustituciones no cambiaron el guión, y siguió siendo el Schalke llevando el mando del partido. Huntelaar avisó con un gol anulado por fuera de juego, y justo después Farfán probó con un disparo de lejos que sacó Iraizoz como pudo.

Y tanto llegó el Schalke, que Raúl volvió a aparecer. A sus 35 años sigue siendo igual de peligroso de cara a la portería, y el Athletic tuvo que ver cómo le hacía el segundo tanto del partido. 

El ‘7′ del Schalke recibió en la frontal del área, y, con una espectacular volea, marcó el segundo tanto para su equipo, pegado al palo izquierdo. El segundo del ex madridista espoleó al Athletic, y en un córner, Llorente devolvió la igualdad al partido al cabecear un córner. 

El club español llegó más fuerte al final, tanto en ánimo como en físico, y no resistieron el empate. De Marcos recibió de Susaeta, y puso el 2-3 del encuentro, aunque justo después se tuvo que retirar por una feísima entrada de Papadopoulos.

Huntelaar puso otra vez el nudo en las gargantas de los leones, con una espectacular volea que dio en el palo justo al final del encuentro, aunque no les dio tiempo a más. 

La última ocasión del encuentro del Schalke fue para Fusch, que mandó un zapatazo muy apurado al palo. Sin embargo, aún tenía que aparecer Muniain, que culminó una gran jugada colectiva para poner el definitivo 2-4.