El técnico de Barcelona, el español Josep Guardiola, aseguró que no tiene ningún problema con que Tito Vilanova sea su sucesor en el cuadro “culé”, y reveló que lo supo desde el momento que dijo adiós al club.
“Me enteré que (él) seguía el mismo día de la rueda de prensa en la que anunciamos que me voy. Él da una lección de valentía y coraje al hacerse cargo de Barcelona porque tiene ilusión de poder hacerlo y esto es lo más importante de todo. Yo, por mi parte, decidiré mi futuro”, comentó en rueda de prensa el estratega.
“Pep” deseó lo mejor a Tito, quien lo sucederá como entrenador en el equipo azulgrana a partir de la próxima temporada, y de la posibilidad de volver a trabajar juntos dijo: “eso queda muy lejos. Ojalá Tito esté mucho tiempo aquí, será señal de que van bien las cosas”.
Al cuestionarle sobre el posible deterioro de su relación con quien aún es segundo entrenador del conjunto blaugrana señaló: “¿Qué yo tengo que aclarar mi relación con Tito? Si interesa que cambie, díganmelo. Dejemos que la relación entre nosotros sea la que sea”.
Respecto a las últimas declaraciones del expresidente del Barca, Joan Laporta, en las que afirmó que la actual junta directiva no había hecho todo lo posible por retenerle, Guardiola dijo que fue “claro en la razón por la que no seré el entrenador la próxima temporada”.
Por otra parte, lamentó las filtraciones y rumores de altas y bajas que giran en torno al equipo y a la final de Copa del Rey, en la que disputarán el título ante Athletic de Bilbao el próximo 25 mayo en el estadio Vicente Calderón.
“Es inevitable. Una cosa es que salgan informaciones y otra que las intuyan ustedes”, y de los “Leones” aseguró que es “un equipo muy exigente. Ha sido la sensación de Europa, con partidos muy atractivos, será un rival muy duro”.