Los trabajadores del metro de Río de Janeiro anunciaron hoy que aceptaron un alza salarial de 8 por ciento de la empresa municipal responsable de este medio de transporte, lo que conjuró una huelga que iniciaría, en la víspera del Mundial de Futbol.

El Sindicato de Trabajadores del Metro de Río de Janeiro (Simerj) dijo en un comunicado que  la decisión se tomó en una asamblea el martes a la noche y fue aprobada con 56 votos a favor y 48 en contra. 

Los trabajadores del metro de Río de Janeiro, la segunda ciudad de Brasil y sede de la final del Mundial el próximo 13 de julio, que pedían un alza del 15 por ciento, aceptaron un aumento del 8 por ciento para firmar un acuerdo.

"Evidentemente no era lo que queríamos, pero fue lo acordado. Queríamos más, pero no siempre se consigue lo que se quiere", aseguró el presidente del sindicato, Heber Fernandes da Silva.

El colectivo presentó 69 peticiones a la empresa, que aceptó el pago de una participación en los resultados, un alza del 14,65 por ciento del salario mínimo, un extra de Navidad, un auxilio mensual para empleados con hijos con deficiencias y una mejora en alimentación.

Tras el acuerdo, queda pendiente la decisión que tomará este viernes el sindicato de metroviarios de Sao Paulo, la mayor ciudad del país y donde mañana viernes Brasil y Croacia jugarán el partido inaugural del Mundial. 

El Sindicato de trabajadores del metro paulista, que demanda un incremento salarial del 12,2 por ciento,  se mantuvo en huelga desde el jueves hasta el lunes.

Los sindicalistas anunciaron una paralización momentánea, pero se prevé esta tarde una asamblea en la que decidirán si se declaran en huelga mañana jueves.