Exhausto por todos los intentos frustrados contra la portería del mexicano Ochoa en el empate sin goles de este martes, el joven astro de la selección brasileña Neymar pasó el día libre concedido por la comisión técnica en los brazos de su novia, la actriz Bruna Marquezine, en un lujoso hotel de Río de Janeiro, según medios locales.

El jugador fue prácticamente el único de la "canarinha" que no habló con la prensa tras el partido jugado en Fortaleza. Elegido por sorteo para un control antidoping, aprovechó para "desaparecer" enseguida, regresando a Río, donde se hospedó con Marquezine en la habitación más elegante del hotel ubicado en el pintoresco barrio carioca de Santa Tereza.

Según el portal UOL Esporte, la pareja ingresó ayer después de las 23 horas en el "Loft Suite", una habitación de 120 metros cuadrados con una vista cinematográfica de Río que ya hospedó a la fallecida cantante Amy Winehouse, la actriz Kate Hudson y el actor Benicio Del Toro.

La nota de UOL agregó que la pareja abandonó el hotel poco antes de las 18 horas de hoy y que los gastos fueron pagados por Marquezine. Una estancia en el hotel cuesta el equivalente a unos 1.800 dólares estadounidenses.

Neymar y los demás jugadores de la selección brasileña volverán a las 11:00 horas del jueves a la concentración en la granja Comary, en la ciudad serrana de Teresópolis, a unos 100 kilómetros de Río, para iniciar el entrenamiento de cara al último partido por el grupo A ante Camerún, equipo que ya está eliminado del Mundial tras sumar su segunda derrota este miércoles, 0-4 ante Croacia.

Tras el empate sin goles ante México, las dos selecciones comparten cuatro puntos, con Brasil en ventaja por el saldo de goles. Croacia tiene tres puntos y peleará por uno de los cupos a octavos ante México en Recife, partido que se jugará simultánemente al de Brasil-Camerún, previsto para Brasilia.