El presidente de la organización civil Suma por la Educación, Francisco Landero Gutiérrez reveló que si la Reforma Educativa aprobada hace unas semanas por el Congreso de la Unión no garantiza la total transparencia en el uso de los recursos que se destinan para el pago de los profesores, para la rehabilitación de escuelas y la dotación de tecnologías educativas, entonces no se puede hablar de una verdadera reforma.

Ante eso, reveló que en un país con amplias necesidades de desarrollo educativo se necesita distribuir de manera eficiente cada peso, porque México es uno de los países que más invierte en el rubro educativo, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), solamente después de Nueva Zelanda, con 6.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

“Seguimos con grandes ineficiencias, ya que muchos de los recursos desaparecen, o bien, son destinados a programas que no generan un impacto real.”

Desde la perspectiva del presidente de la asociación civil Suma por la Educación, la Reforma Educativa considera puntos que son positivos para la consolidación de los procesos de calidad.

Sin embargo, agregó que también tiene muchos vacíos que deben corregirse en la marcha, para ofrecer mejores resultados a favor de los estudiantes de las escuelas públicas.