Sin las acostumbradas aglomeraciones, ni siquiera la propaganda de instituciones patito, se vivió un examen de admisión a la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) muy distinto a otros años prepandémicos.

Quienes no podían faltar eran los padres de familia, quienes en menor número esperaron pacientemente a que sus hijos hicieran su examen de cerca de 4 horas, con todo y lluvia.

Para este lunes, les tocó el turno a jóvenes estudiantes que apenas se graduaron de secundaria y ahora pretenden ingresar a algunas de las preparatorias de la máxima casa de estudios en el estado.

Se podía ver a los padres sentados a lo largo de la entrada a Ciudad Universitaria, por la Avenida Carlos Camacho, mejor conocida como Boulevard Valsequillo.

En tanto los jóvenes para poder ingresar, tenían que pasar un filtro sanitizante, además de que deberían portar los aditamentos como careta y cubrebocas, para evitar contagios de coronavirus SARS-CoV-2 que produce la enfermedad de Covid-19.

Las caras de preocupación no eran menores que la paciencia para esperar algunas horas, esperando que les vaya bien.

Tal es el caso de René Bolaños, junto con su esposa y pequeña hija exestudiante de una Secundaria Técnica, esperaron sentados en la banqueta a que saliera con toda la confianza que aprobará Ana Tere.

Indicó que llegaron provenientes de San Miguel Xoxtla, a las 10:17 en punto, porque su entrada era a las 11 de la mañana, por lo que no querían tener algún retraso que generara problemas.

-¿Cómo le fue en la pandemia?

-Bien, afortunadamente todo bien, con sus clases en línea.

-¿Por qué la BUAP?

-Es la mejor opción, cualquiera quisiera venir acá, (…) afortunadamente sí estuvo estudiando, tuvo recesos en la secundaria, esperamos que el resultado sea positivo, hay mucha confianza.

También sentada en la banqueta casi en la puerta de CU, Patricia Ortega, dijo que llegó con su Angy Sofia, con al menos una hora de anticipación, para evitar cualquier problema.

Señaló la también trabajadora de la BUAP, que aunque no existe un plan B, siempre habrá opciones para seguir estudiando.

“Estuvo con las guías preparándose desde hace meses, estuvo echándole ganas mi’ija (…) yo soy trabajadora de la universidad y para mi no hay mejor escuela”, sostuvo.

-¿Cómo le fue en la pandemia con la estudiada en casa?

-Fue un poco difícil por estudiar a través de la computadora, pero pues ni modo, uno respetarle sus horarios, alimento, lo normal, pero el encierro ha sido difícil, la falta de interacción con amistades.

“Ella se deprimió un poco, porque falleció el abuelo, el encierro, pero le está echando ganas, ahorita la veo más tranquila y contenta, un poco más nerviosa, pero es normal”, aseveró.

Cristian, joven estudiante de administración de la BUAP, acompañó a su hermano menor Ángel, para la aplicación del examen, ya que sus padres no podían por sus trabajos.

Aseguró que el recién egresado de secundaria, se preparó en la escuela y con la guía.

-¿Por qué la opción de la BUAP?

-Porque es una escuela con prestigio que se ha destacado en tener grandes noticias.

Dijo que ahora por la pandemia se complicó el estudio al hacerlo a distancia por computadora, ya que no es lo mismo aprender de este modo a presencial.

“Hay que echarle ganas a todo (…) se extraña la convivencia, echar relajo en los salones, incluso las materias que dan en línea es más difícil comprenderlas en línea”, aseveró.

A partir de este lunes 28 de junio, la BUAP inició la aplicación de la Prueba de Admisión y Diagnostico (PAD) a más de 66 mil aspirantes a ingresar a los programas de nivel medio superior y superior para el ciclo escolar 2021-2022.

De acuerdo con las convocatorias del Proceso de Admisión 2021 para los programas educativos de los niveles superior que abarca Licenciatura y Técnico Superior Universitario y para medio superior que incluye técnico, preparatoria y bachillerato, la meta es recibir a 37 mil 481 estudiantes de nuevo ingreso.