La Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) recuperó la normalidad tras la entrega de todas sus instalaciones por parte de los estudiantes paristas, poniendo fin a un movimiento que se prolongó por más de un mes.
La protesta culminó con la liberación de las Facultades de Psicología, así como Filosofía y Letras, la última unidad académica en paro, marcando el cierre de un capítulo de intensas negociaciones y diálogo entre autoridades y universitarios.
El proceso de entrega comenzó el pasado 31 de marzo, cuando los paristas de Ciudad Universitaria (CU) abrieron los accesos a la Comisión Institucional de Diálogo, tras firmar acuerdos que atendieron sus demandas.
Incluso, la rectora María Lilia Cedillo Ramírez encabezó personalmente la recepción de CU, agradeciendo a los medios por su cobertura y destacando la sensibilidad de los estudiantes al optar por el diálogo.
“Inicia una nueva etapa para retomar con gran compromiso todas las actividades sustantivas de la universidad”, afirmó entonces Cedillo, subrayando que el próximo paso será publicar la convocatoria de admisión 2025.
El paro, iniciado el 24 de febrero en la Facultad de Medicina por la reducción de plazas para prácticas clínicas, se extendió rápidamente a otras facultades, incluyendo CU, CU2, el Complejo Cultural Universitario y unidades del Área Centro, como Filosofía y Letras, Lenguas y Psicología.
Los estudiantes exigían freno al acoso de parte de catedráticos a alumnas, mejoras en infraestructura, seguridad, planes de estudio, demandas recopiladas en un pliego petitorio general y otros específicos por unidad académica.
Aunque hubo tensiones, como el enfrentamiento verbal del 15 de marzo en CU entre paristas y alumnos que pedían clases presenciales, el diálogo prevaleció.
Tras la entrega de CU el 31 de marzo, las actividades presenciales se reanudaron el 2 de abril en la mayoría de las instalaciones, salvo en Filosofía y Letras, así como en Psicología, donde las mesas de diálogo se prolongaron hasta el 4 de abril.
La BUAP confirmó se recibieron estas últimas instalaciones, con clases presenciales ya programadas.
En tanto, La institución no precisó si el calendario vacacional de Semana Santa (14-20 de abril) se ajustará por el retraso.
Los acuerdos, detallados por el vicerrector José Jaime Vázquez López en el Consejo Universitario, incluyen 33 minutas con unidades académicas y 11 del pliego general, abordando desde comedores hasta transporte universitario. Algunos puntos se resolverán a corto plazo en alrededor 45 días, otros a mediano en el mes de septiembre y largo plazo, hasta el fin del rectorado en octubre.
La rectora reconoció el valor del movimiento estudiantil, que dejó “grandes enseñanzas” a la comunidad, y agradeció al gobernador Alejandro Armenta por su apoyo respetando la autonomía universitaria.