De acuerdo a la propuesta del regreso a clases el próximo 30 de agosto, será en un modelo híbrido, es decir, con clases en el aula y clases virtuales, para los integrantes del magisterio disidente de la sección 51 del SNTE, no es prudente regresar a las aulas, por la creciente tercera ola de COVID-19 que se vive.
Por eso, el representante de la CNTE en el Estado de Puebla, Juan Durán Martínez, dijo que el problema del retorno a clases presenciales, va más allá del regreso a las aulas, porque el modelo propuesto, representa doble trabajo para los maestros.
Señaló, que los mismos programas de aprendizaje que se impartirán en las aulas, también tienen que impartirse en la enseñanza en línea, lo que les implica doble trabajo.
Dijo que de acuerdo a la política oficial de sana distancia y de cuidados e higiene, reveló que no hay instalaciones suficientes para garantizar esas condiciones de distanciamiento y la garantía que se evitarán contagios.