En la contienda por la dirigencia estatal del PAN, el partido puede salir dividido y fracturado, aseguró la analista política de la UPAEP, Claudia Ramón Pérez, en la competencia entre Augusta Díaz de Rivera y Genoveva Huerta Villegas.
Dijo que la percepción del panismo tradicional, "es que el partido blanquiazul está cooptado por el grupo de Huerta Villegas", por eso, hoy encuentra posibilidades que más que unidad, haya un reclamo por la cooptación que hay al interior del instituto político.
La académica recordó que, el PAN sigue dañado por el reparto de candidaturas llevado a cabo por la ahora aspirante a presidenta, en las pasadas elecciones.
"Por eso, el llamado para cerrar filas en la contienda interna y no convertir al partido, en un instrumento patrimonialista y que, al contrario, sirva para la unidad que les hace falta".
La contienda entre Augusta Díaz de Rivera y Genoveva Huerta, recordó Ramón Pérez, es la primera elección después de la muerte de Rafael Moreno Valle, en que se enfrenta el grupo morenovallista contra el grupo tradicional que busca refundar al PAN.
Y aunque, aparentemente, Huerta Villegas tiene toda la estructura del partido, los que se integraron al PAN por los ideales del panismo, quieren retomar la dirigencia, "que fue arrebatada por el ex gobernador Rafael Moreno Valle".
Por eso, ese grupo considera necesaria la refundación del instituto político y la recuperación de los ideales, “buscan recuperar un poco de esa línea que los legitima como verdaderos defensores de los ciudadanos”.
Y cuando se pensaba que Genoveva Huerta iba sola por la dirigencia estatal, surgió Augusta Díaz de Rivera, “que le pone sabor a la contienda, porque parecía que estaba dada la reelección y la consolidación del grupo morenovallista”.
La politóloga de la UPAEP, destacó que Díaz de Rivera, se ubica dentro del panismo de cepa, quien genera una verdadera competencia entre los dos grandes grupos dentro del PAN, los morenovallistas y los del panismo tradicional.
Ese grupo tradicional, dijo la académica, abrió el camino para picar piedra para consolidar al PAN, con apoyos marcados, “además, hace eco de las inconformidades de los grupos tradicionales por la repartición de candidaturas”.
Ese grupo que hoy se ve reflejado en la candidatura de Augusta Díaz de Rivera, hace un llamado para que el PAN sea instrumento para corregir el rumbo de la política en el Estado de Puebla y recuperar al partido para los ciudadanos.
El grupo tradicional, agregó, se une para combatir la coacción que Genoveva Huerta llevó a cabo desde el año 2010, que se apoderó de la burocracia interna del partido.
Entonces en la presente contienda, se enfrentan los alineados con el grupo morenovallista contra la derecha ideológica tradicional.