Aunque todavía existe un rezago en la distribución de chips para el armado de autos, el catedrático investigador de la Facultad de Ingeniería Industrial y Logística de la UPAEP, José Luis Martínez Flores, afirmó que, aunque son altas las pérdidas para la falta de esos chips, eso no se volverá a repetir en las siguientes olas de contagios por Covid-19.

“No hay una forma determinada de decir que pasará ante una contingencia como la pandemia, pero las experiencias pasadas y presentes deja experiencia de la forma en que hay que actuar”.

El especialista señaló que se espera que la carencia de los chips dentro de la cadena de suministro, se estabilice en corto tiempo, porque las pérdidas son por altos números, “a la gente que compra un auto le ha tocado carencia, no hay autos; se fabrican muy pocos”.

Martínez Flores reconoció que son efectos sustanciales dentro de la industria automotriz, porque los chips se utilizaron para otras ramas como en otros productos, pero se abandonó la industria automotriz.

Ejemplificó que esta crisis de chips pegó en la fabricación de celulares, computadoras y memorias para los autos, aunque las empresas tenían un plan, pero ese fue rebasado.

Con la pandemia de coronavirus, aseguró, se explota la cantidad de chips para trabajo en cada sector, "pero se requiere producir más computadoras, porque se superó la planeación de las empresas".

Por otro lado, reveló que en la actualidad, se apuesta por la gran demanda en computadoras, con lo que se satisface la demanda en rubros urgentes, pero se dejan de surtir en la industria automotriz.

Por su parte, Diana Sánchez Partida, directora académica del posgrado en Logística de la UPAEP, reconoció que todavía no se puede dimensionar el impacto económico, pero son grandes las pérdidas a causa de la pandemia.